Los dólares se incorporan a las tradiciones de los venezolanos para recibir el año

Zurima Vásquez | Video: Miguel "Cuchi Romero" | Edición: David Garrido

La llegada del año nuevo, en algunos lugares, es llamada también «El Cañonazo», debido a que antiguamente la entrada al 1 de enero era anunciada por el sonido de uno de los cañones que provenían del cuartel San Carlos.

Los venezolanos, como en cada país tienen su forma peculiar de recibir el año, y algunas de las tradiciones y rituales que realizan justo el 31 de diciembre, han sido transmitidas de generación en generación.

Una de las costumbres es colocar en la mesa un plato de lentejas, ya que, se piensa que así el Año Nuevo vendrá cargado de abundancia, riqueza y dinero. Algunos las incluyen en la cena y otros las comen después de las 12:00 de la media noche.

También es costumbre llevar dinero en las manos o en los bolsillos, justo a la medianoche, para que en el venidero año mejorare la economía de la persona.

Se limpian las casas de adentro hacia afuera, y se desecha el agua utilizada para alejar los malos augurios. Algunas personas acompañan la limpieza con aromas cítricas para atraer la prosperidad.

Algunas familias encienden velas de diferentes colores, verde para la salud, amarillo para la abundancia, azul para la paz y rojo para el amor.

Los solteros suben y bajan tres veces de una silla, para tener una pareja estable. También usan ropa interior roja para que no falte la pasión en la relación.

Los que desean viajar salen a las calles con una maleta.

Hay quienes llevan ropa interior amarilla para atraer la buena suerte.

Una tradición muy clásica es comer 12 uvas, una a una a medida que suena cada campanada, pidiendo 12 deseos para el año entrante.

No se deja de lado el brindis que acompaña el cañonazo, el cual indica que llegó el nuevo año, al son de las típicas canciones «El Año Viejo» con Tony Camargo, «Faltan cinco pa’ las Doce» de Néstor Zavarce y «Año Nuevo» de la orquesta venezolana Billo’s Caracas Boys.