Gao Fu, director del centro chino para el control y prevención de enfermedades, dijo que las autoridades creen que el virus probablemente provenía de «animales salvajes en el mercado de mariscos»
Según un análisis genético del coronavirus, la nueva cepa de éste pudo haberse originado en murciélagos o serpientes.
El estudio se basa en el examen de la secuencia del genoma del virus, liberado por las autoridades a raíz del brote.
Una investigación publicada en la revista Science China Life Sciences, patrocinado por la Academia China de Ciencias de Pekín, analizó las relaciones entre la nueva cepa y otros virus. Descubrió que el coronavirus que surgió en la ciudad de Wuhan estaba estrechamente relacionado con una cepa que existe en los murciélago.
Señalaron los investigadores que «el hecho de que los murciélagos sean los huéspedes nativos del Wuhan CoV (coronavirus) sería el razonamiento lógico, aunque sigue siendo probable que haya huéspedes intermedios en la transmisión de murciélagos a humanos».
Asimismo, un segundo estudio publicado en el Journal of Medical Virology identifica a las serpientes como el posible animal que podría haber sido un «huésped intermedio».
El mercado de alimentos donde apareció el virus ofrece una variedad de vida silvestre exótica para la venta, incluidos zorros vivos, cocodrilos, cachorros de lobo, salamandras gigantes, serpientes, ratas, pavos reales, puercoespines y carne de camello, entre otras.