Es la mayor causa de afección respiratoria en niños, subrayó el infectólogo Raúl Istúriz
Los pocos meses de vida no fueron la garantía de que se salvaría. El cuadro respiratorio podía confundirse con otros, especialmente en tiempos en los que los virus y las bacterias parecen los señores. Las pruebas para descartar virus sincitial respiratorio (VSR) resultaron negativas, pero las muestras analizadas en sus familiares confirmaron la presencia de este agente. La ciencia y la tecnología de una clínica venezolana no pudieron conservarle la vida, pero su historia posiblemente libre a otros niños de un destino similar.
El relato lo hizo en público la doctora María Graciela López, expresidenta de la Sociedad Venezolana de Infectología, durante la sesión sobre el virus sincitial respiratorio que ofreció el experto Raúl Istúriz este jueves 22 de junio en el contexto del Congreso Venezolano de Infectología que se realiza en Caracas.
Aun cuando Istúriz centró su exposición en datos de Estados Unidos, queda claro que el VSR es la mayor causa de afección respiratoria en niños y que al menos 70% de los niños se infectan en el primer año de vida. Entre 1% y 2% de los bebés menores de seis meses son hospitalizados por esta infección, con un tiempo promedio de siete días en el centro asistencial.
Los niños no son los únicos vulnerables. También afecta a los adultos mayores, aunque -como lo apuntó Istúriz- es poco reconocido y no hay conciencia sobre la gravedad (un estudio en EEUU evidenció que 57% de los profesionales sanitarios rara vez lo consideran un patógeno relevante). A más edad, recordó el infectólogo, mayores las condiciones de riesgo y las hospitalizaciones. Este virus puede ser el desencadenante de infartos y neumonías, entre otras afecciones.
Resaltó que, en países como Venezuela, las disparidades empeoran la situación. «Niños y adultos que residen en áreas socioeconómicas bajas tienen una incidencia mayor de hospitalización», detalló.
Como lo relató Istúriz la FDA estadounidense aprobó dos vacunas contra el VSR para personas mayores de 60 años. Hay otras en proceso, y es probable que el año próximo se disponga del primer antiviral para esta infección. El médico evaluó que, en estas circunstancias, la mejor vacuna posible sería una que combine en una sola inyección protección contra tres cepas de influenza, dos cepas de COVID-19 y el virus sincitial respiratorio.