Este miércoles 28 de junio se introdujo la demanda por el caso de las muestras almacenadas que fueron dañadas por un empleado y que han generado una polémica que pudiera extenderse
Una muestra que permaneció en un congelador durante 20 años en el Instituto Politécnico Rensselaer de Troy, de Nueva York, EEUU, fueron dañadas luego que un empleado de limpieza desconectara el congelador donde se encontraban.
Uno de los abogados demandantes alegó que en el centro de análisis se realizaba «una gran investigación sobre fotosíntesis, dirigida por el profesor KV Lakshmi, la cual tenía el potencial de ser «pionera» en el avance del desarrollo de paneles solares», y que gracias a este incidente fueron destruidas.
Según los abogados, las muestras almacenadas a -80 °C quedaron «insalvables», lo que causó daños por valor de US$1 millón.
La universidad donde se encontraba el laboratorio ha demandado a la empresa de limpieza del empleado en cuestión por haberlo entrenado de forma inadecuada. La compañía de limpieza tenía un contrato con la empresa científica por el monto de US$1,4 millones.
El individuo, acabó con un trabajo investigativo que permaneció por décadas al apagar un congelador en el que se albergaban esas muestras vitales para obtener resultados precisos sobre el avance de los paneles solares.
La empresa había colocado un cartel que alertaba: «Este congelador emite un pitido porque está en reparación. Por favor, no lo mueva ni lo desenchufe. No es necesario limpiar esta zona”.Sin embargo, el empleado de limpieza asegura que los ruidos generados por el congelador «eran realmente molestos.»
Según el informe presentado por el personal de seguridad del instituto, el encargado de la limpieza pensó que «estaba encendiendo el interruptor cuando en realidad lo había apagado.»