«La situación que vivimos los bioanalistas es bastante difícil, porque los laboratorios de los hospitales no tienen insumos, los pagos son muy bajos y los muchachos que egresan no intenten incentivos para trabajar en los hospitales», detalló Fátima Garcés, vicerrectora y bioanalista
La celebración del Día de los Bioanalistas contó, este viernes 25 de abril, con una invitada de excepción: Fátima Garcés, bioanalista y vicerrectora académica de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
Garcés, quien estuvo presente en la misa realizada en la Iglesia San Pedro de Caracas, recordó que se recuerda el nacimiento del sabio Rafael Rangel. Sin embargo, «la situación que vivimos los bioanalistas es bastante difícil, porque los laboratorios de los hospitales no tienen insumos, los pagos son muy bajos y los muchachos que egresan no intenten incentivos para trabajar en los hospitales, cosa que nos preocupa mucho, porque los hospitales son los sitios donde más pacientes se reciben».
Los docentes no están en mejores condiciones. «Los profesores universitarios que impartimos la carrera de bioanálisis también tenemos bajos salarios y es una situación compleja para estimular que estos muchachos se queden en el país trabajando en los centros asistenciales».
El salario de los profesores «es prácticamente inexistente, porque un docente titular gana unos 8 dólares, y un instructor gana 4 dólares. Entre el recién graduado y el que más preparación tiene, 4 dólares de diferencia. Cobramos un bono único, que son 120 dólares, que los gana todo el mundo independientemente del cargo que ocupe».
Recordó que carreras como bioanálisis solo se dictan en las universidades públicas y siempre habrá estudiantes interesados en cursarlas. Los estudiantes ingresan por el sistema OPSU, el mecanismo de prueba interna, el propedéutico de la Facultad de Medicina y los convenios en áreas como deporte y cultura.
«La matrícula de la universidad, en general, ha bajado muchísimo. El año 2006 había 52 mil estudiantes y actualmente tenemos 26 mil. Por supuesto, los estudiantes de la escuela de bioanálisis también bajaron: de 600, a 380, más o menos», refirió Garcés. «En cada acto de grado, que tenemos dos actos de grado, egresamos 14 o 15 estudiantes. Ingresan 50 en cada semestre, pero se van quedando atrás porque, uno de los problemas que tenemos, es que vienen mal preparados de bachillerato y raspan las primeras materias. La gente se frustra y abandona la carrera».
"La situación que vivimos los bioanalistas es bastante difícil", señaló este #25Abr Fátima Garcés, vicerrectora académica de la UCV y bioanalista, durante la celebración del Día del Bioanalista https://t.co/Qoy3t43aiB pic.twitter.com/LRXOEx1Gkv
— contrapunto.com (@contrapuntovzla) April 25, 2025
Como vicerrectora académica, instó a abordar el problema de la formación en los últimos años de bachillerato, porque luego los estudiantes no tienen las herramientas para carreras de ciencias, ingeniería y medicina.