Los venezolanos no tienen motivos para celebrar este 18 de noviembre en el país, la doctora en nutrición y docente Yngrid Candela ratificó que Venezuela atraviesa desde hace años una crisis alimentaria
Este 18 de noviembre se conmemora en Venezuela el Día de la Alimentación y tradicionalmente se celebra a fin de fomentar la buena alimentación de las personas.
Una alimentación balanceada es fundamental para sustentar el día a día, además de crear hábitos alimenticios que influyan en una buena salud, desde el nacimiento hasta edades adultas.
La doctora en nutrición y profesora de la Facultad de Dietética y Nutrición de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Yngrid Candela, ratificó que Venezuela atraviesa desde hace años una crisis alimentaria y que actualmente las organizaciones e iniciativas no poseen los mecanismos suficientes para respaldar las necesidades en cuanto a la alimentación.

“La crisis alimentaria en el país inició en el año 2012, a pesar de que Venezuela en el 2004 implementó una series de programas que le permitió alcanzar la seguridad alimentaria, ocho años después ya ocurre la escasez con la producción de alimentos y desde ahí el país no ha parado de verse afectado”, afirmó la doctora Yngrid Candela.
En este sentido, asegura que no toda la población venezolana tiene acceso a comprar los alimentos que necesita y responsabilizó al Estado de la escasez productiva, del aumento de los productos y de la reducción de importaciones.
“Actualmente no hay datos que nos permita tomar herramientas al respecto, la disponibilidad de alimentos y el deterioro agroalimentario no nos permite cubrir las necesidades alimentarias porque el estado ha fallado. Hubo incremento de costos en los productos, las importaciones se han venido reduciendo desde el año 2012 y a su vez lo disponible en el mercado está afuera del alcance del venezolano promedio”, explicó la profesora Candela.
Para el 2019, Venezuela pasó a formar parte del grupo de 41 países que requieren asistencia alimentaria externa.
En consecuencia, la doctora en nutrición aseguró que los venezolanos enfrentan un índice significativo en falta de nutrientes.
“De acuerdo a los estudios y una serie de características necesarias evaluadas en el 2019, Venezuela presenta un déficit en la producción e insuficiencia en alimentación por debajo del 90% de las necesidades calóricas”, expresó.
Asimismo, señaló que la disminución de los poderes adquisitivos y otros factores se unen para dificultar una alimentación balanceada en los venezolanos.
“El programa de alimentos apunta a un deterioro cualitativo y cuantitativo; menos cantidad de alimentos y peor calidad que no aportan nutrientes, Venezuela tiene buena producción de frutas y vegetales y a pesar de ello no es suficiente para una alimentación completa”, dijo Candela.

De igual manera, afirmó que a nivel de consumo de alimentos, la población venezolana está fraccionada en tres grupos.
«Podemos decir que hay tres grupos en cuanto al consumo alimentario; el primer grupo come, sin embargo, no cuando quieren ni donde quieren, el segundo grupo hace frente a la alimentación con el consumo de pasta, arepas, arroz, queso y huevos, pero carecen de otras proteínas y el otro grupo poblacional son las comunidades rurales, quienes verdaderamente la pasan rudo”, señaló la profesora de la UCV.
Finalmente, indicó que la ayuda que proporciona el gobierno de Nicolás Maduro no es suficiente para el respaldo de las familias venezolanas y que algunas Organizaciones sociales han intervenido para apoyar el sistema alimenticio.
“En estos momentos no existe ninguna iniciativa para mejorar el sistema alimenticio, sin embargo, organizaciones sociales que antes no se dedicaban a apoyar el sistema de alimentos, hoy se dedican a eso; como Caritas de Venezuela y otras que buscan formalizar ese tipo de iniciativas para apoyar a comunidades venezolanas. El gobierno debería estar generando protección pero con el subsidio de alimentos estratégicos de 16 solo llegan 5 tipo de alimentos y los bonos hogares de la patria no pasan de 2 o 3 dólares; las mamás dicen que compran harina y caraota”, aseguró Candela.

También recordó que un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), indicó que en América Latina y el Caribe la inseguridad alimentaria se incrementa con mayor rapidez y esta podría alcanzar el 9,5% de la población en 2030.
En relación a ello destacó, “nosotros marchamos con dos emergencia, las organizaciones lo han reportado, producción y consumo, nuestro porcentaje en situación de hambre en relación a los otros países es el más alto ellos están por debajo de 5% y ya nosotros estamos por 30%”, agregó la docente Candela.






