El partido Acción Democrática (AD), uno de los pilares históricos de la democracia venezolana, celebra el 13 de septiembre su 84 aniversario en medio de una profunda división interna que ha fragmentado su liderazgo y debilitado su presencia política nacional.
Sin embargo, el «partido del pueblo» asegura que seguirá la lucha por recuperar a Venezuela y a los símbolos que han sido judicializado por las autoridades de Venezuela.
En un video posteado en sus redes sociales, la organización con fines políticos asegura seguir defendiendo a Venezuela y sus valores. «Vamos a seguir luchando por Venezuela y ahora por Acción Democrática en resistencia. Vamos a seguir, vamos a seguir en la lucha por nuestro partido y por nuestra Venezuela. A seguir trabajando, aseguir trabajando. Vámonos pues».
Fundado el 13 de septiembre de 1941 por Rómulo Betancourt, AD fue durante décadas el partido hegemónico del país, gobernando por más de 27 años y siendo protagonista de hitos como el Pacto de Puntofijo.
Sin embargo, en la actualidad, la organización enfrenta una disputa por su conducción entre dos facciones: el sector liderado por Henry Ramos Allup, reconocido por la Plataforma Unitaria, y el grupo encabezado por Bernabé Gutiérrez, respaldado por decisiones del Tribunal Supremo de Justicia.
Celebraciones y reorganización
A pesar del contexto de fractura, dirigentes regionales han anunciado actividades conmemorativas en distintos estados del país. En Táchira, por ejemplo, el secretario general regional Miguel Reyes informó que se realizarán eventos en 29 municipios, incluyendo conversatorios sobre la vida institucional del país y la reorganización de las estructuras de base.
“Acción Democrática no se rinde, es un partido con mucha trayectoria. Estamos revisando toda la estructura organizativa para fortalecer nuestras bases de cara a los desafíos políticos que vienen”, afirmó Reyes.
Un legado en disputa
La división interna ha generado confusión entre militantes y simpatizantes, especialmente en procesos electorales donde ambas facciones han presentado candidatos distintos bajo el mismo nombre. Esta situación ha sido objeto de críticas por parte de analistas políticos, quienes advierten que la fragmentación debilita la capacidad de AD para incidir en el escenario nacional.






