Las experiencias de transiciones y de procesos de negociación en América Latina demuestran que el diálogo es una las herramientas más poderosas para construir soluciones que beneficien a la sociedad.
Andrés García fue uno de los invitados a “Venezuela Conversa” una iniciativa del Movimiento Ciudadano Dale Letra y del Foro Cívico, en la que señaló que la construcción de los espacios de diálogo y encuentro requiere la generación de las condiciones que lo hagan posible.
Por su parte, Claudia Nikken destacó el rol de la sociedad civil tiene en los procesos de generación confianza entre los actores, sobre todo en un escenario donde el diálogo ha sido visto como una forma de “engañar al otro”.
EL DECÁLOGO
Andrés García es asociado senior del Instituto para las Transiciones Integrales (IFIT por sus siglas en inglés) y profesor de la facultad de economía de la Universidad Externado de Colombia y ha formado parte de los procesos de diálogo de paz en el vecino país.
Plantea un menú de “10 reflexiones a modo de propuestas” sobre las cuales trabajar para generar espacios diálogo.
“Yo creo que el principal desafío que tenemos siempre es cómo logramos colaborar y entendernos como especie en las distintas sociedades. La pregunta que quiero desarrollar es: ¿Qué significa crear condiciones para el diálogo?”, destaca el experto en negociación.
Como primera reflexión habla de “salirse de la lógica suma cero”.
“Incluso cuando arrancamos a dialogar, siempre pensamos que el diálogo es buscar ganarle al otro, en una lógica transaccional, de confrontación, cuando realmente se trata de construir algo conjunto”, señaló.
La segunda idea planteada es “asumir la perspectiva de proceso”.
Señala que se debe ser consciente “que la cosa no va a cambiar de la noche a la mañana. En Colombia tuvimos 20 años de movilización social por la paz, el mandato por la paz en el 97, hasta que finalmente llevó a que se produjera; la sociedad estaba lista para que los tomadores de decisión arrancaran un proceso de negociación”.
Aclara que tampoco se trata de una cosa que va a tomar décadas, “porque las necesidades son muchísimas, y la necesidad de resolver el conflicto es urgente”.
“Ser ambiciosos pero realistas”, sentencia como tercer punto y señala a propósito de lo que ha sucedido en Venezuela, y es que “se debe ser ambicioso, en las apuestas, en las metas, en lo que queremos, en la necesidad de transformar el conflicto en el horizonte de democracia y de reinstitucionalización al que se le pueda apuntar, pero partiendo siempre de la realidad, de las restricciones dadas del contexto”.
Reconoce que en Colombia se cometieron errores porque “a veces se tiende a crear unas expectativas enormes, y eso lleva después a una frustración gigantesca. Entonces, hay que ser muy cuidadosos, por supuesto, en lanzar la pelota lejos, en querer que lleguen muy lejos, pero siempre desde el contexto de qué es lo viable, políticamente hablando”.
Los otros puntos del decálogo que fueron puestos sobre la mesa son:
–¿Cómo se construye masa crítica y moméntum?
– Estar preparados, disponibles y abiertos.
– Multiplicar los diálogos.
– Aprender del camino andado.
– Prestar atención al diseño de procesos.
– Trabajar en narrativas incluyentes.
– Tender puentes con los que piensan distinto.
García destacó la idea de la construcción de un territorio de lo común y observó que la Agenda Social y de Derechos llevada adelante por el Foro apunta en la dirección correcta y se inscribe en medio de las acciones para la generación de confianza entre los actores.
¿QUIÉN PAGA EL COSTO DE NO NEGOCIAR?
Por su parte Claudia Nikken señaló que «se tiende a demonizar al diálogo porque se equipara con el apaciguamiento».
Otro de las reservas que se tiene sobre el diálogo apunta a que se “usa como una herramienta para engañar al rival bajo la premisa de vencer sin combatir”.
Esto envía la señal de que “las partes no perciben el costo de no negociar”, y Claudia Nikken sentencia: “Al final, ese costo ha terminado trasladándose a los venezolanos. Somos todos nosotros los que pagamos ese costo».
La profesora de la UCV, doctora de la Universidad de París II y formada en la mediación y negociación señala que el verdadero diálogo “implica escucharnos con suficiente profundidad sin perder la identidad, pero reconociendo los valores del otro. Para asumir ese proceso, hay que empezar por tener un entendimiento común de la realidad, y no temer llamar a las cosas por su nombre».
En medio de este escenario está el papel de la sociedad civil que destaca Nikken, y la relaciona directamente con las iniciativas que propone la Agenda Social y de Derechos.
“La presentación de demandas y propuestas desde la sociedad civil, es una posibilidad de subir los costos a todos, o bajarle los costos a todos los actores”, señala y hace hincapié en que esto no podría ser tomado como una manipulación de los sectores en pugna.
Agrega que que si se percibe que “la gente pide y la gente reclama, eso una forma de generar la condiciones para la negociación”.
“Venezuela Conversa” es una iniciativa del Movimiento Ciudadano Dale Letra y el Foro Cívico, respaldado por Fedecámaras radio, Caracas Ciudad Plural y Contrapunto.com.
El próximo encuentro será este miércoles 30 de abril con la participación de Mariela Ramírez y Paul Ríos quienes conversarán sobre «La participación ciudadana como clave para el cambio»
Vea el programa completo en este enlace:






