El dirigente político y exrector del CNE, Rafael Simón Jiménez, aseguró que el sistema electoral venezolano es tan invulnerable que hasta ahora el Gobierno no ha podido demostrar su victoria ni va a poder demostrarla.
En su opinión, las audiencias en el TSJ suplantan una responsabilidad que corresponde al CNE y las calificó de «bochornosas».
Resaltó que todos pensaron que el 28 de julio sería un punto de inflexión y no fue así.
Según Jiménez, nos guste o no nos guste, nos arda o no, no hay otra solución que buscar un entendimiento.
El dirigente cree que las conversaciones no están cerradas y que estas ocurren fuera del país, donde la mayoría ha exigido los elementos que respalden los resultados ofrecidos por el CNE.
Jiménez cree que el 28 de julio «se demostró que un Gobierno con un rechazo de 80% no puede ganar unas elecciones».