La educadora señaló que van a paralizar la educación y a mantenerse en asambleas permanentes
Llegó este lunes a la plaza Candelaria y se le acercaron trabajadores públicos, personas que querían fotografiarse con ella. La maestra Elsa Castillo es una celebridad, y donde llega, se convierte en el centro de atención. No fue diferente durante la nueva protesta de las trabajadoras y los trabajadores públicos, a los pies de la estatua de Rafael Urdaneta.
Castillo anunció que la próxima semana protestarán en el Ministerio de Educación, y advirtió que si el gobierno vuelve a poner tarimas o toldos, igual estarán en las calles. «Ahora como no tienen militares en el Ministerio de Educación nos ponen un montón de tarimas. Maduro, te lo juro: si ese día esta ciudadana se siente bien de salud, me monto en las tarimas. Me ponen una tarima y me monto en tu tarima. Me voy a montar en tu tarima y el discurso te lo voy a hacer en tu tarima», garantizó.
La educadora señaló que van a paralizar la educación y a mantenerse en asambleas permanentes. Afirmó que la Lopna no los puede obligar a trabajar, porque ya no tienen salario sino que mantienen un voluntariado.
«Se necesitan dirigentes sindicales con pantalones capaces de pasar ese pliego de peticiones a pliego conflictivo, y ellos saben quiénes son los que lo tienen que hacer», emplazó.
La maestra instó a los padres y representantes a mirar «con muchísimo, muchísimo cuidado» la ley de participación estudiantil, por considerar «que termina de destrozar el sistema educativo y la educación pública». Sostuvo que esta ley trata a niñas, niños y adolescentes como adultos, y no debe ser así «porque no han alcanzado la madurez». Cuestionó que se autorice la constitución de figuras jurídicas: «¿ES un estudiante o un trabajador? ¿es un estudiante o es un comerciante? ¿Es un estudiante o es un político? ¿Qué es lo que pretende en el PSUV? ¿Meter en los liceos a la juventud del PSUV, formarla en los liceos y las escuelas? No sean caraduras».
Defendió las políticas educativas de la llamada Cuarta República: «En ese tiempo procuraban partidas extraordinarias» para pagar los salarios de los trabajadores.