Sus aspiraciones políticas no se centran solamente por la silla de Miraflores. En el 2020 anunció su candidatura a diputado ante la Asamblea Nacional por el estado Carabobo y en el 2021 pretendió ser gobernador de la referida entidad
El candidato Javier Bertucci encara su segundo intento a la presidencia del país. Su primera prueba fue en el pasado año 2018 cuando incursionó en el mundo de la política y obtuvo el 10,82% de los votos totales. En este 2024 se nota convencido de llegar más lejos de lo que logró en su primera vez como aspirante a mandatario de Venezuela. En ambas ocasiones con la organización ‘Esperanza por El Cambio‘.
Javier Alejandro Bertucci Carrero es oriundo de Guanare, estado Portuguesa. Nació el 16 de noviembre de 1969. Este segundo reto por la presidencia de la nación lo enfrenta con 54 años. Empresario, pastor evangélico y político, esto es Bertucci.
Casado. Ya tiene 30 años desde que contrajo matrimonio con su esposa Rebeca Barrios. De este romance nacieron tres hijos: Raquel Rebeca, Valeria Alejandra y Javier Abraham. Pero a esta familia se le suma otro nombre más: Sebastián Bertucci, un hijo adicional para Javier y Rebeca, un hijo adoptivo.
Desde temprana edad Bertucci trabajó con el sector agropecuario. La agricultura y ganadería ayudó a que su familia se levantara económicamente en la década de los 80’s. Inició en el cristianismo aproximadamente en el 1990 y no fue hasta en el 1999 cuando fundó la iglesia Maranatha Venezuela.
Sus aspiraciones políticas no se centran solamente por la silla de Miraflores. Desde el 2018 ha postulado su nombre a varios cargos públicos. En el 2020 anunció su candidatura a diputado ante la Asamblea Nacional por el estado Carabobo siendo electo para el período 2021-2026.
En el 2021 dio un paso más. Se postuló para la gobernación de Carabobo, pero aquí no le fue muy bien, quedó tercero en la carrera por ser mandatario regional.
En el Parlamento forma parte del Grupo de Amistad Parlamentaria Venezuela- Unión Europea y, además, es el segundo vicepresidente de la Comisión Permanente de Energía y Petróleo.
Bertucci ha pasado por momentos difíciles en el transcurrir de su vida. En el año 2010 fue arrestado por los delitos de contrabando y asociación para delinquir cuando intentó trasladar un barco tipo tanquero con 5 mil toneladas métricas de diesel desde Puerto Cabello hasta República Dominicana. Cumplió seis meses de prisión domiciliaria, pero su caso duró abierto por un período de 12 años. En 2021 se decretó el sobreseimiento de la causa a su favor.
En el año 2016 fue señalado en el delicado caso de los Papeles de Panamá. De acuerdo a sus palabras, su única mención “fue porque intenté” ser el presidente de una empresa la cual estaba valorada en cinco millones de dólares en un paraíso fiscal, esto mediante el bufete Mossack Fonseca.
La noticia más difícil de todas
Pero en el 2022 enfrentó lo que pudo haber sido la noticia más dura de todas: fue diagnosticado con un cáncer mortal. Una noticia que le cambió por completo la vida, puesto que, el tumor “amenazaba con exterminarme”. Bertucci sostuvo que recibir un diagnostico de cáncer, hace que la persona aprecie la vida y, que la misma, debe vivirse “de manera correcta”.
“Fue una cosa muy dura para mí, para mis hijos, mi esposa, para toda la familia. Fue muy fuerte ver la posibilidad de la muerte cara a cara (…) Te cambia por completo. Para empezar, te hace apreciar la vida más que antes, te das cuenta que la vida es un regalo de Dios y que debe vivirse de forma correcta en todos los aspectos, primero apreciando tu familia, apreciando los mejores momentos con los seres que realmente mereces que tú lo compartas, y, finalmente, aprecias amigos, la vida de otros muchos más. Y te da un cambio diametral de la forma de ver la vida, vivir la vida y tu forma de enfrentar los problemas de la vida”, dijo en entrevista ofrecida a Contrapunto.com. Dos meses después, Bertucci informó a sus seguidores que estaba totalmente libre de cáncer, sanidad que le atribuyó a Jesucristo y a su bondad.
Bertucci- sopa, marca registrada
El aspirante presidencial comenzó a ser reconocido en el 2018 por hacer y compartir en sus mítines políticos una “rica sopa” con todos sus seguidores. Miles de sopas eran entregadas en todo el país a los asistentes que en aquel año comenzaron a escuchar sus propuestas y empezaron a intercambiar ideas por el bien de la nación que estaba en plena crisis. Hoy día ya no puede dejar a un lado su famosa sopa porque en cada zona que llega, sus simpatizantes le preguntan por ella, ya actualmente es su “marca” en toda la nación.
“Está difícil llegar ahora sin esa sopa porque Bertucci-sopa es como una marca registrada, después hemos visto a otros dando sopa por ahí, pero bueno, esas son imitaciones baratas”, indicó.
Los pasatiempos de Bertucci
Al momento de preguntarle sobre su pasatiempo preferido, Bertucci fue claro en responder que, para él, leer la biblia todos los días es lo más importante. Sus gustos musicales se centran en el llano venezolano.
El deporte que más sigue el aspirante presidencial es el tenis y, asegura, que el número 3 del Ranking ATP, Carlos Alcaraz es su jugador preferido.
¿Algo de lo que se arrepiente?
Para Bertucci Carrero siempre será importantísimo el compartir con su familia y, algo de lo que se arrepiente hoy día, es de haber sacrificado tiempo para cuestiones que al fin y al cabo no terminan siendo tan importante como lo es estar rodeado de su núcleo familiar.
“Pasar más tiempo con mi familia, siempre es valioso. Siempre que tengamos la oportunidad hay que hacerlo. Es lo único de lo que me arrepiento. De haber sacrificado tiempo para cosas que supuestamente eran más importante cuando lo más importante es la gente que te ama”, enfatizó.
De no resultar ganador en estos comicios presidenciales, este no será el fin de la carrera política de Bertucci, puesto que asegura que seguirá trabajando en su nicho natural, la iglesia cristiana y conversando con todos los pastores del país para que llegue el mensaje que transmite a los más de cinco millones de feligreses activos, y los que pueden irse sumando con el transcurrir de los años, para que en el año 2030 pueda amalgamar la cantidad de votos necesarios y así llegar a ser presidente de Venezuela.
“Mi campaña está enfocada actualmente en los pastores del país. 63 mil iglesias registradas y es allí donde estoy trabajando y con ese nicho puedo ganar la presidencia. De no ganar en este 2024 seguiré haciendo esto continuamente todos los meses hasta 2030 para tratar de amalgamar una cantidad para aspirar a la silla presidencial en 2030. Así que esa silla está en situación de conquista”, finalizó.