«Vemos las condiciones para una reorganización de la oposición en los liderazgos regionales. El llamado a la no elección sería un grave error que lo han venido cometiendo desde 2005 hasta hoy», explica el director de Giooby
Varias veces Venezuela ha sido otra. Y, según los datos del sondeo de opinión hecho por Giooby, válido para el primer trimestre de 2025, Venezuela volvió a ser otra de nuevo.
Ray García, director de Giooby, aclara que son una empresa de software y de marketing político, no una encuestadora. Pero por solicitud de varios clientes de la oposición venezolana decidieron emprender el estudio.

El trabajo se hizo en 98 ciudades, cara a cara, para determinar el avance tecnológico del país (que evidenció buenos números en relación con el acceso a internet), para que los políticos supieran dónde están parados y para entender qué pasa con la economía, detalla García en conversación telefónica con contrapunto.com.

En cuanto a la política, los resultados indican «que la gente quiere un nuevo liderazgo de oposición», Al menos 22% está dispuesto a votar, y este porcentaje puede aumentar.
Pero «la oposición parece dispuesta a cometer el mismo error que comete cada cinco o 10 años», como sucedió en 2005, 2015 y 2025. «Han caído en esa rueda de ratón cíclica que no les ha permitido dar un paso afuera».
García es de la idea de que la oposición debe comenzar a ganar espacios como si fuese un juego de pelota; debe ganar base por base, concejal, diputado, alcalde, gobernador porque de esa manera podrán crear una estructura nacional basada en la unión de muchos liderazgos regionales.
Sobre la economía, el consultor sostiene que el chavismo hizo lo que le recomendó Fidel Castro al destruir los medios de producción tradicionales y crear los propios. Solo 35% de los venezolanos reciben ayuda económica de sus familiares en el exterior, lo que indica que la economía interna se está moviendo. Según los resultados, hay rechazo a las sanciones.

El país tiene tecnología, políticamente tiene el caldo de cultivo para crear una nueva ola de oposición y enfrentar el sistema, y hay estabilidad de la economía. Estas son tres condiciones «para revertir cualquier situación, pero trabajando. No es de mago; es suela, sudor y saliva. Se los digo a los políticos: salir del aire acondicionado, bajar a ponerse la chaqueta y no permitir ese llamado de que no vayan a una elección».

Un 22% dice que votará y 53% afirma que no sabe si lo hará. «La orden debe ser regional». Es «decirle a cada región que vamos a votar, asumir el trabajo de hormiga de reunificación de la masa opositora a escala regional, que es titánico y es el que hay que hacer». La política es emoción, y hay que emocionar y entusiasmar en cada región.
Los líderes regionales más conocidos deben dar un paso al lado y permitir espacio a los nuevos rostros, considera García. A su juicio, más que estrategias nacionales se trata de estrategias locales y de liderazgos frescos locales. Hay rostros, admite, que ya generan cansancio. El país necesita algo que lo sacuda, con los liderazgos locales «tirados en la calle».

Nuevos liderazgos, nueva narrativa y enfoque en lo regional parecen ser los elementos clave. El reto es doblegar los egos e implementar estrategias regionales, subraya.
«Vemos las condiciones para una reorganización de la oposición en los liderazgos regionales. El llamado a la no elección sería un grave error que lo han venido cometiendo desde 2005 hasta hoy. Sé que hay un hartazgo en la población, y una desesperanza por 2024, pero es el último jalón que tienen que darle a esa fuerza regional que podría tomar esos espacios y podría volver a disputar el poder en el futuro con algún liderazgo que salga nuevo, fresco; no de los mismos rostros, no de las mismas estructuras que se han conocido siempre», resume García.
Visto así como lo expone García, la oposición podría ocupar «nuevos espacios, intentar ocupar espacios en la Asamblea Nacional» y a partir de allí «generar una estrategia nacional de oposición».