En un hotel capitalino y ante lo que se constituye en su equipo de trabajo, se comprometió a realizar una campaña de altura, a respetar el resultado y lograr un gobierno sin presos ni perseguidos políticos, ni con represión a los medios de comunicación
“A nadie en el barrio le gusta vivir mal, a nadie del barrio le gusta pasar miseria, pasar hambre, y se lo digo yo que conozco el hambre en persona, y la viví y la vencí. Yo sé cómo se vence el hambre”, dijo Benjamín Rausseo al momento de presentar su candidatura a la primaria de la oposición ante los delegados del movimiento que apoya sus aspiraciones.
El acto, celebrado en un hotel de Caracas, consistió en la presentación de un balance de las actividades que han venido realizando los equipos que apoyan a Rausseo en todos los estados del país, lo que permitió a todos tener una mejor visión de los logros alcanzados y de las carencias que faltan por superar. Al finalizar la presentación de todos los delegados, le tocó el turno al candidato.
Más Benjamín que Conde
En sus palabras fue más Benjamín Rausseo que Er Conde del Guácharo, pero aseguró que en su campaña iba a mezclar a ambas personalidades, porque sin el personaje que lo dio a conocer en Venezuela el no sería candidato presidencial, y “al Conde le debo mucho”.
El primer paso es el más difícil, dijo Rausseo, y celebró que lo dieran. Agradeció la presencia y el esfuerzo que han venido dando los que lo acompañaban en el acto, les aseguró que el camino no iba a ser fácil ni corto, “hoy estamos dando el primer paso, el más importante. La unión de voluntades de distintos orígenes, de distintos pensamientos. Señoras y señores, yo soy Benjamín Rausseo y me presento como candidato a las primarias”.
Recordó el camino que ha recorrido desde que salió de Musipán, un “pueblo que no aparece en el mapa”. Si les preguntan de dónde vengo, prosiguió Rausseo, digan que “vengo de varios barrios. Vengo del Tejero, vengo de Sierra Maestra, vengo de Tronconal, vengo de la Curva de Molina, de Miguel Peña, de Caña de Azúcar. Yo vengo del barrio, porque yo conozco como piensa la gente del barrio y de los pueblos, sé cómo sueñan, cuáles son sus sueños, anhelos, esperanzas”.
No le gustan las dádivas, menos que con ellas se haga “extorsión política” y se comprometió a generar oportunidades a los venezolanos, a encabezar un gobierno que garantice una educación de calidad, salud, seguridad jurídica y personal, para que cada quien con su esfuerzo sea dueño de su destino, “porque como lo dijo el joven, los que estamos abajo nos acostumbramos a ver hacia el sol y las estrellas, y eso es lo que estamos buscando, una oportunidad de salir de abajo”.
A los que no le dan chance de cara a las primarias, les aconsejó que sigan creyendo en eso, pues le conviene que se confíen, “que nos crean inofensivos”. Recordó a sus padres, en particular a su mamá, quien “lavaba y planchaba y yo era el delivery, yo era el Yummy”, a quien le agradece que siempre le aconsejó que estudiara y se preparara.
Quiere una clase media y una pequeña y mediana empresa fortalecida. Les dijo que les preguntaran a los demás candidatos si quieren ganar la primaria o la presidencial, “yo quiero ganar la presidencial”.
Después de ejercer varios “oficios”, desde limpiabotas hasta motorizado, Rausseo encontró el teatro y estudiando con Levy Rosell creó «Er Conde del Guácharo», personaje al cual le debe lo que es “y la gente me dice tú eres El Conde o Benjamín, yo soy los dos, porque desde que ese personaje entró a mi vida cambiaron muchas cosas para mí y mucha gente”.
Resalta su éxito empresarial, faceta que ponen de relieve sus partidarios para demostrar que es un gerente eficiente y dijo que lo hizo al no descartar la posibilidad de que sus chistes dejaran de hacer reír a la gente. Creó, hace 35 años, Guácharo Enterprise, tuvo negocios buenos y negocios malos, y hoy cuenta con 16 empresas. “Yo logré lo que quería, convertir el humor en fuentes de trabajo”.
Varios de los delegados solicitaron recursos para poder organizar a los partidarios y Rausseo les dijo que él se iba a acercar a los artistas, a los empresarios para pedirles apoyo. Sugirió que lo emularan, y también que anotaran las respuestas recibidas, para decirles como Will Smith: si no estás en mi lucha, no esperes estar en mis éxitos.
Campaña de altura
Se comprometió a realizar una campaña de altura, sin ofensas para sus adversarios, pidiendo que todos tengan un comportamiento similar y a quienes les reconoció el derecho que tienen a aspirar a la candidatura. Pidió que se eliminaran las inhabilitaciones, para que los electores sean los que decidan libremente quién quieren que los represente. Ofreció una campaña “llena de alegría, de esperanza. Una campaña llena de propuestas y soluciones, porque nada ganamos haciendo inventario de problemas, ya Venezuela sabe cuáles son”.
Ofrece trabajar con los mejores en cada área, sin importarle su ideología política o creencia religiosa. Se comprometió a fortalecer las instituciones, “para que esas instituciones se encarguen de juzgar a los que cometan delitos”, pues aspira a una justicia imparcial, también un país sin presos ni perseguidos políticos. “Me comprometo a mantener las mejores relaciones con nuestra Fuerza Armada Nacional, siempre en el marco del respeto mutuo y la Constitución”.
Si alguien tenía dudas sobre el compromiso que tiene Rausseo con la primaria recibió su respuesta. Dijo creer “firmemente” en la Comisión que encabeza Jesús María Casal, porque conoce a sus miembros y tiene presente que de la fortaleza de ese árbitro depende el triunfo en 2024.
Si no es el ganador, se comprometió a respetar el resultado, pero también acotó que “si yo soy el ganador, no me gustaría que me acompañaran muchos”, sin alusión directa para ninguno de sus adversarios.
Ofreció educación de calidad con maestros y profesores bien pagados en escuelas de primera, así como crear una red de asistencia médica primaria, con un servicio de telemedicina centralizado “para que haya un médico virtual para cada habitante en cualquier parte de Venezuela”.
Recordó a los migrantes y recitó un poema de su autoría. “Los que están adentro, los que están afuera somos una patria, somos Venezuela”, además de mandarles un abrazo “muy grande y profundo para mis hermanos que andan por el mundo siempre los tenemos presentes”. Les prometió que hará lo posible para que voten en la primaria y en 2024.
Concluyó proponiendo eliminar la reelección indefinida. “Estamos seguros que vamos a ganar, vamos a cobrar y vamos a gobernar, porque vamos a gobernar con una Asamblea Nacional, con gobernadores y alcaldes y no todos están de este lado, así que nosotros vamos a ganar, cobrar y vamos a gobernar. Si un día los hice reír, hoy los invito a soñar con la mejor Venezuela”.