Para la vicepresidenta del MAS, María Verdeal, «la alarmante situación económica y salarial de los trabajadores venezolanos no podrá resolverse si el Gobierno sigue evitando el diálogo para discutir la contratación colectiva y demás beneficios laborales».
«A látigo y decreto no se resuelve la crisis económica del país». sentenció la dirigente masista.
En el encuentro de los lunes con los medios Verdeal señaló que «la imposición del Estado en su rol de patrono imposibilita hacer los correctivos necesarios para mejorar la calidad de vida de los trabajadores».
Recordó que «al dejarse de lado lo que significó en un momento la figura de la tripartita, se paralizó la discusión de la contratación colectiva. El sector educativo acumula más de 1.200 días sin aumento salarial y tampoco se han hecho ajustes en las tablas de la administración pública».
“La economía no se decreta ni se controla con un látigo. Los problemas se solucionan con políticas estructurales de avanzada en materia económica y no con un modelo fracasado y obsoleto”, alertó.
En aras de defender «los derechos de todos los trabajadores venezolanos», Verdeal rechazó la «pretensión de desaparecer las estructuras sindicales y que solo se mantengan las que están en manos del oficialismo».
“Es inconcebible que un ciudadano que está en el poder y que se hace llamar presidente obrero haya acabado con el salario, las pensiones y las jubilaciones de los trabajadores”, subrayó.
La dirigente deploró que las pensiones se hayan convertido en «sal y agua”, mientras que el monto creciente del dólar oficial pulveriza el salario de los trabajadores. Todo esto sumado a la enorme crisis de los servicios de agua potable y electricidad, así como al mal estado de las arterias viales».
Señaló asimismo que «la situación en el interior del país es más delicada debido a las lluvias y a la crecida del río Orinoco que ha afectado seriamente a varios estados, entre ellos, Mérida, Trujillo y Táchira».
«Un sector espera acciones extranjeras en contra de Venezuela y el otro evita que eso se produzca, mientras que las dificultades ciudadanas en materia económica y social avanzan diariamente. ¿Cuándo se va a gobernar de verdad? ¿Cuándo se ejercerá el poder en beneficio de la población y no para perseguir y seguir teniendo presos políticos? ¿El poder es para mantenerlo o para gobernar?», subrayó.






