La avenida Francisco de Miranda, a la altura del Centro Comercial Líder, se llenó de ciudadanas y ciudadanos vestidos de blanco. La frase «hasta el final» cambió, este sábado, por el «échenle bolas» que pronunció la dirigente opositora
Los ánimos de quienes caminaban hacia Petare no se calentaron tanto como lo hizo el sol que este sábado 17 de agosto se desplomó sobre Caracas. La invitación de la Plataforma Unitaria era para las 10:00 de la mañana a la altura del Centro Comercial Líder, y una hora después había varias cuadras llenas de gente. A la protesta masiva acudieron personas vestidas de blanco, con rosarios de madera, con estampitas y, sobre todo, con las copias de las actas de votación de las elecciones del 28 de julio.
La movilización convocada por María Corina Machado, a la que se sumó la manifestación del oficialismo en el oeste caraqueño, llevó a un despliegue policial inusitado en la capital. Sin embargo, los simpatizantes de la oposición se las ingeniaron para llegar al lugar y permanecer allí varias horas.
«Claro que tenemos miedo», comentó uno de los asistentes, porque «aquí puede haber alguien que nos ataque», agregó, mientras mostraba los edificios de los alrededores. «Pero estamos aquí».
Luis Ghersi, integrante de Creemos Alianza Ciudadana, llevó algunas copias de actas originales. «Las actas nadie las pudo fabricar. Cada uno de los partidos recibió del CNE actas originales. Algunos las pudimos fotocopiar y hacer esto alusivo a las actas originales. De estas actas se podría escanear el QR y obtener la información de ellas», detalló. Ghersi consideró que fue muy hábil la estrategia de la Plataforma Unitaria «para que no pudiera haber escape en la verdad». Las actas «permiten saber la verdad», subrayó.
El TSJ no es el ente que pueda tener «vela en este entierro», alegó. «Hasta que el CNE no publique las actas el CNE no tiene manera de actuar». Ghersi espera que la presencia ciudadana en la calle ayude a un desenlace que obligue a acceder «a la verdad, y la verdad está en las actas».
«Liberen a todos los presos políticos», solicitaba una pancarta colocada en el asfalto, con la lista de los ciudadanos encarcelados en el país por razones políticas.
En este punto se reunieron defensores de derechos humanos para visibilizar lo que sucede en el país. En este momento en Venezuela «se está irrespetando la libertad de expresión: se está persiguiendo a la gente por lo que opina, por lo que expresa en redes sociales. Se está irrespetando el derecho a la manifestación pacífica: hay más de 2 mil presos reconocidos por Nicolás Maduro por protestar, por exigir que se repsete la voluntad popular», explicó Marino Alvarado, defensor de derechos humanos e integrante de la organización Provea. Se viola, también, «el derecho a la integridad personal, porque en la medida en que se van visitando los presos se van conociendo los testimonios de malos tratos».
Alvarado advirtió que se siguen practicando allanamientos ilegales durante los cuales se roban los bienes de las familias. «Sigue existiendo la desaparición forzada», alertó. «Por lo menos unas 200 desapariciones forzadas documentadas».
Selfies, propaganda electoral sobre cómo votar por González Urrutia en los pasados comicios, oraciones y conversaciones acompañaron la espera por el famoso camioncito en el que Machado y otros dirigentes políticos se desplazan hasta los puntos de encuentro con la población. «Hasta el final», repetían, aquí y allá, en los pequeños y grandes grupos.
Antes de las 2:00 de la tarde el camión apareció. Machado se subió a él y compartió el espacio con Juan Pablo Guanipa (Primero Justicia), a quien le dio «un yeyo» por la intensidad del sol; César Pérez Vivas, quien se mantuvo en pie con un sombrero; Alfredo Ramos, dirigente de La Causa R; Delsa Solórzano, presidenta de Encuentro Ciudadano; Biagio Pilieri, dirigente de Convergencia.
Machado habló sobre su visión del proceso que vive el país. Sostuvo que la estrategia que lidera llegó a una quinta etapa. Abrió los brazos a quienes votaron por el oficialismo, en un mensaje ampliamente aplaudido. Instó a la gente a mantenerse en las calles. Como suele ocurrir en los mitines, las personas presentes entablaron diálogos con ella, como si la dirigente política los escuchara. «Lo más duro viene en los próximos meses, pero lo vamos a aguantar», replicó una mujer, convencida de que Venezuela va a un cambio político.
No cayó una gota de lluvia en toda la tarde. El camión siguió su camino y, a su paso, avanzaron las fotos y los videos. En un momento de su discurso, Machado retó al gobierno: «Échenle bolas». Esa frase, «échenle bola», acompañó la retirada, a pie, de quienes este sábado cambiaron el día de descanso por una jornada de protesta.