Destacó que el cambio político se logra con elecciones, ya que es la única vía democrática que plantea la constitución cada cierto período
La coordinadora nacional del movimiento Unión y Progreso, Mercedes Malavé dijo este lunes que lo más importante no es lograr la unidad opositora, sino unificar a la población para recuperar el voto como instrumento de cambio político.
En entrevista concedida al programa Primera Página de Globovisión, Malavé subrayó que no hay manera de resolver los problemas cotidianos que agobian al venezolano -fallas en los servicios públicos, escasez de gasolina, hiperinflación, sueldos de hambre, ausencia de transporte público, ausencia de políticas contra el covid-19, entre otros, sin un cambio de gobierno.
Destacó que el cambio político se logra con elecciones, ya que es la única vía democrática que plantea la constitución cada cierto período. «Por tanto la oposición debe convocar a la mayoría, no grupitos muy pequeños, convocar a la mayoría no significa la unidad de políticos, sino volver a lo más clásico de la política: la capacidad de posicionar un mensaje atractivo para que la población siga los liderazgos» y agregó «esta es la tarea que tenemos».
«Para cumplir con este objetivo, los líderes opositores tienen que salir a las calles con su equipo, con realismo y propuestas claras».
Asimismo, recalcó que la crisis solo se resolverá cuando los políticos den un mensaje claro que permita al liderazgo entender que deben asumir el problema que existe en el país: «nos debería unir a todos, poner nuestra mejor voluntad para acabar con la tortura cotidiana del venezolano».
No saldremos de la crisis sin cambio político
Malavé declaró que con todo lo que pasa en Venezuela, está claro que los problemas desbordan al Gobierno y parece que «estamos frente a un castillo de naipes que se derrumbará en cualquier momento, es una situación que está lejos de soluciones por la ceguera de un gobierno que no entiende que solo no puede resolver los problemas».
«No hay forma de reactivar la economía porque para eso es necesario el auxilio financiero y están sancionados, no es verdad que votando desaparecerán las sanciones, eso no se resolverá fácilmente. El tema de las vacunas tampoco se va a resolver si tenemos el problema del reconocimiento internacional; lo mismo con el problema financiero, va a seguir la devaluación, la reconversión no acabará con el tema de la hiperinflación. No hay manera de sincerar los salarios, de dialogar con empresarios porque es un gobierno que no entiende que para gobernar necesitas el concurso de todos y no solo el apoyo de quienes repiten retahila de consignas».
En este orden de ideas, Malavé planteó que cuando los países están controlados por extremistas, donde se violan DDHH y la cotidianidad está sometida a la tortura, la única manera de resolver esta crisis es mediante un gobierno de emergencia económica y social que se ocupe realmente de acabar con la crisis. «Esto es mucho más importante que cualquier condición electoral», enfatizó.
«La pregunta clave es: ¿quién lo convoca?», cuestionó. «Debería ser convocado por el ejecutivo nacional con su congreso, pero están más ocupados en ceder ante el chantaje y la adulación, que en llamar a la unión nacional. Para lograr un gobierno de amplitud hay que dejar a un lado el proselitismo que nadie sigue, y buscar la forma de resolver los problemas».
Si esto no es posible, siguió, la segunda alternativa es la organización para la participación electoral. «En medio de esta feria electoral, este bochinche, de este circo la tarea díficil es que la gente se sienta motivada porque vemos que por un lado, en el gobierno renuncian alcaldes, gobernadores, destituyen ministros; y por otro lado, la oposición está infiltrada, desarticulada, se deja llevar por aspiraciones personales y sobre todo vemos la incapacidad que tienen de ponerse de acuerdo para un fin común».
«Esto desmotiva, pero debemos seguir insistiendo en la necesidad de renovar los liderazgos y buscar a personas que convoquen a los municipios».