El papa Francisco dejó para la humanidad la Encíclica Laudato Si y también Laudate Deum, resaltó este miércoles el padre Manuel Teixeira, director del ITER. También, lo que hizo sobre pueblos indígenas. «La preocupación del papa por la Tierra era algo permanente», destacó en entrevista con Unión Radio.
También pidió por una economía más racional y sana, que protegiera la naturaleza, subrayó Teixeira.
Aclaró que no se abre una línea de trabajo en la Iglesia católica por estos pronunciamientos, pero sí, la posibilidad de reflexión y el hacerse cargo del ambiente. «Una escuela católica debería pensar en cómo recoger los desechos de manera diferenciada, y habría que pensarlo». Los católicos «tenemos una responsabilidad».