No se restringió el derecho a la protesta, destacó el concejal José Gregorio «Goyo» Cáribas
La ordenanza de convivencia ciudadana en Caracas ya está vigente y «se entendió que debe ser una ordenanza sin sesgo de partido ni color político y hecha para la ciudadanía», subrayó este martes el concejal José Gregorio Cáribas.
Los artículos en los que se restringía el derecho a la protesta y a la manifestación pacífica fueron eliminados, resaltó. Pretendían aplicar una sanción con 300 veces el valor de la moneda del BCV, comentó, pero «privó la sensatez», apuntó Cáribas en entrevista con Unión Radio. También se rebajaron las multas, refirió.
En el municipio Sucre de Petare, en cambio, «se sanciona el libre derecho a la protesta», contrastó.
En la ordenanza de Libertador se sanciona a motociclistas que transiten por aceras, excedan el límite de velocidad, transiten por el canal de alta velocidad o lleven más de dos personas. El consumo de bebidas alcohólicas en vías públicas, los juegos de envite y azar en espacios públicos están prohibidos, detalló.
Igualmente se sancionará a quienes no tengan a sus mascotas en buenas condiciones, o no recojan sus excrementos, indicó el concejal.
La contaminación sónica es objeto de sanciones, reiteró, y eso incluye la música, los gritos y las palabras soeces. «Quedan prohibidas la caravanas vehiculares estudiantiles porque se han recibido denuncias», alertó el dirigente de UNT.
En cada parroquia debe haber una casa de convivencia ciudadana, y le corresponde a la Policía Municipal hacerla cumplir.