La Administración de Nicolás Maduro rechazó este miércoles la llegada del buque ‘One Guyana’ de producción, almacenamiento y descarga flotante (FPSO, por sus siglas en inglés) a un área marítima pendiente por delimitar con Guyana.
«Esta maniobra, impulsada por el Gobierno de Guyana en alianza con ExxonMobil, constituye una violación a principios fundamentales del derecho internacional, que obligan a abstenerse de adoptar medidas unilaterales en zonas sin delimitación acordada», señaló la Cancillería venezolana en un comunicado publicado en Telegram.
Asimismo, dijo que al «persistir en esta conducta», Guyana demuestra un «abierto desprecio por la legalidad internacional y por los compromisos asumidos en el Acuerdo de Argyle de 2023 (firmado por Caracas y Georgetown en diciembre de 2023 en San Vicente y las Granadinas, con el objetivo de rebajar las tensiones), poniendo en riesgo la paz y la estabilidad regional de forma temeraria».
«Venezuela no reconoce concesión alguna otorgada en dicho espacio y advierte a las empresas involucradas que podrán ser objeto de acciones legales, y que no se les reconocerá derecho alguno sobre los recursos explotados ilícitamente», añadió.
La Administración de Maduro reafirmó su «vocación de paz» pero advirtió que «ejercerá con firmeza la defensa de sus derechos soberanos y no aceptará provocaciones ni hechos consumados».
El martes, el Gobierno guyanés anunció que la llegada del buque ‘One Guyana’ marcará el hito de generar casi un millón de barriles de petróleo en alta mar.
En este contexto, se aproxima la puesta en marcha del proyecto de explotación Yellowtail de ExxonMobil en el bloque Stabroek, tras arribar la nueva planta petrolera, construida por SBM Offshore.
‘FPSO One Guyana’ será el cuarto buque de producción en el país, sumándose a los FPSO Liza Destiny, Liza Unity y Prosperity.
A principios de este mes, Venezuela alertó sobre una supuesta «operación de falsa bandera» para «atacar» una plataforma de la estadounidense ExxonMobil en aguas que Caracas considera pendiente por delimitar con la vecina Guyana.
La vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, denunció el pasado 5 de abril que esta presunta operación buscaba «justificar algún tipo de represalia y acción contra Venezuela».