Un acto unitario, realizado en Faces-UCV, unió en una sola voz a todos los sectores universitarios. Acordaron clases magistrales, marchar el 1 de mayo y votar el 28 de julio
A las 10 de la mañana se escuchaba, en el auditorio Carlos Marx de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la UCV (Faces), la voz del Yordano que denunció el caos nacional de los años 1990 con su canción «Por estas calles». Treinta años después la pieza sigue desatando pasiones. Este martes 9 de abril, en el acto «La Universidad al rescate de la educación y el trabajo», los gremios y las autoridades de la primera casa de estudios del país se unieron en un solo mensaje ante el gobierno: la exigencia de presupuesto, salarios, respeto por la autonomía y la libertad de pensamiento.
Esa casa común que es el Himno Nacional dio paso a las denuncias y las propuestas en una jornada moderada por la profesora Luisa Torrealba y el dirigente sindical Fidel Jaramillo.
«Con el concurso de todos la universidad prevalecerá». Con estas palabras el rector de la UCV, Víctor Rago, finalizó su intervención. Le siguió José Gregorio Afonso, presidente de la Apucv, quien hizo un enérgico llamado -bastante aplaudido- a defender la autonomía universitaria. La secretaria de Apufat, Argelia Castillo, expresó que solo con un cambio de gobierno será posible un cambio en las políticas educativas.
Previamente, en declaraciones a los medios de comunicación, el rector expresó que «la crítica situación material de la universidad no admite más dilaciones». Rago afirmó que hay problemas urgentes «que es necesario resolver», como los salarios del personal y la falta de presupuesto.
Afonso sostuvo que es urgente «un cambio de rumbo en materia de política educativa, en materia de política laboral». No es posible que el país avance si no se valoran la educación y el trabajo. «El profesor de más alto escalafón en la UCV gana menos de lo que gana una persona en Cuba que cobre el salario mínimo. En Cuba el salario mínimo es 42 dólares y aquí un profesor titular gana 14 dólares. Podemos ver el desprecio por el trabajo», protestó.
«Hay un valor intangible que está allí: solo rescatando la educación y el trabajo nuestros jóvenes pueden permanecer en el país y detener esta centrífuga», aseveró Afonso.
El presidente de la FCU, Jesús Mendoza, denunció que los estudiantes «tienen una beca de 5 dólares, un comedor que abre de manera intermitente porque lo que da el Ministerio solo alcanza para tres días al mes, no tenemos gasoil para todas las rutas y nuestros profesores están teniendo un sueldo miserable».
Mendoza propuso que la universidad haga clases magistrales en la calle y en plazas «para evidenciar la crisis universitaria». Como lo subrayó, en clara alusión a las obras de la comisión presidencial, de nada sirve recuperar la infraestructura si no se atienden las necesidades de profesores, estudiantes y trabajadores: «Pintando una pared o impermeabilizando un edificio no está logrando absolutamente nada en la academia».
Las autoridades universitarias se unen a los gremios en una sola voz, una voz de protesta, no solo por el salario de la comunidad sino por la academia, «que en este momento está herida de muerte porque la política de liquidación del salario liquida la academia», reprochó Eduardo Sánchez, presidente de Sinatra-UCV. «La Universidad, la educación, se lanza a la calle para defender el derecho que tiene y defender el derecho de todo el país».
La proclama de este martes se llevará a organismos internacionales como la Unesco, la OIT, la ONU y, también, al gobierno venezolano, adelantó Sánchez.
Los ucevistas acordaron mantener sus exigencias ante el gobierno nacional, marchar el 1 de mayo, clases magistrales en la calle y participar en las elecciones del 28 de julio.