Se concentraron en la esquina de Altagracia, frente a la sede del IVSS, y de allí se movilizó una comisión hasta la Vicepresidencia de la República. También solicitaron la libertad de los luchadores presos
Algunos llevaban paraguas. Otros pararon las gotas con su cuerpo. Lo cierto es que ni la lluvia que cayó sobre Caracas este jueves desanimó la protesta de jubilados y pensionados por una pensión digna que permita acceder a los alimentos y las medicinas.
Se concentraron frente al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), en la esquina de Altagracia. Y allí reiteraron que con 130 bolívares no se puede vivir. Incluso, plantearon comenzar con 100 dólares y aumentar progresivamente.
De allí partió una comisión rumbo a la Vicepresidencia, a una cuadra de distancia (suficiente para empaparse). Otros se quedaron, con sus pancartas y mojados de la cabeza a los pies, a la espera de una respuesta.
Esa respuesta llegó una hora después, cuando Emilio Lozada confirmó que fueron recibidos y Edgar Silva -ambos dirigentes de la Coordinadora de Pensionados y Jubilados de Venezuela- recordó que han acudido a varias instituciones, sin conseguir un compromiso claro.
Silva aseguró que se está aplicando una política de exterminio contra los jubilados y pensionados.
También denunció que el gobierno está desconociendo las recomendaciones de la OIT.
En la manifestación también solicitaron la liberación de los luchadores encarcelados hace dos meses.