La Red de Áreas Conservadas de Venezuela agrupa a quienes resguardan espacios naturales de forma autónoma y con recursos propios. El tema se discutió en la Semana de Investigación y Extensión 2025 de la Facultad de Ciencias de la UCV
Unidos por la protección del ambiente, los integrantes de la Red de Áreas Conservadas de Venezuela ya han logrado resguardar 15 mil hectáreas en las que florecen especies en peligro de extinción y otras que afrontan peligros diversos.
Este grupo voluntario, formado por propietarios de áreas, líderes comunitarios y representantes de instituciones, desarrollan «acciones voluntarias de conservación» para «proteger un espacio de forma autónoma y con recursos propios», explicó este miércoles Vilisa Morón, coordinadora de Ecoconservación Ciudadana e integrante de la Red.
Este miércoles, en el contexto de la Semana de Investigación y Extensión 2025 de la Facultad de Ciencias de la UCV, integrantes de la Red expusieron algunas experiencias. Como lo precisó Morón, un mapeo inicial mostró que hay, al menos, 150 áreas. «En la Red tenemos 38 miembros, áreas que se ha verificado que están contribuyendo con la conservación de la biodiversidad y que han declarado estar de acuerdo con las responsabilidades».
En las 15 mil hectáreas evaluadas «hemos evidenciado que las actividades productivas están ayudando a preservar espacios naturales», pero quedan muchas más. Se entiende «que todas estas áreas tienen una actividad productiva que garantiza la sostenibilidad del espacio, y tienen otras áreas de menor o ninguna intervención».
La investigadora @Vimz1987, integrante de @RAC_Venezuela, explicó este #14May que en el país hay unas 15 mil hectáreas protegidas por particulares y comunidades. La Red de Áreas Conservadas ya tiene 38 miembros https://t.co/LF00vCQVkZ pic.twitter.com/fkFnloQhO6
— contrapunto.com (@contrapuntovzla) May 14, 2025
En esos espacios hay jaguares, aves residentes y migratorias, entre otras especies.
Las áreas conservadas pueden actuar como corredores «y son garantes de la biodiversidad del país». Aunque en Venezuela «no existe una ley que reconozca formalmente estos espacios» en la Ley de Bosques habría una mención al referirse a reservas de fauna silvestre en manos de comunidades o propietarios, aunque no se especifican las garantías y derechos. En el ámbito internacional «se han reconocido las medidas de conservación basadas en áreas».
Para mejorar el trabajo en Venezuela, Morón explica que las personas que impulsan las áreas conservadas necesitan la garantía «de que los espacios no serán considerados ociosos». Por otro lado, «necesitamos un apoyo en inversión para el desarrollo de capacidades para apoyar la gestión», porque alejar la cacería ilegal y hacer cortafuegos «no es un trabajo que puedan hacer solo las comunidades». En consecuencia, «necesitamos una articulación entre las autoridades ambientales y los manejadores de este espacio».
En otros países se ofrecen beneficios, como acceder a bonos de carbono, fondos de adaptación y reducción de impuestos.