20.7 C
Caracas
domingo, 14 diciembre, 2025
Publicidad

Ciudadanos verdes (III) Los árboles necesitan protección y mantenimiento para poder aliviar el cambio climático en las ciudades

En el país "necesitamos árboles sanos, seguros y adecuados, y eso depende de políticas públicas, de las ordenanzas", subraya Esmeralda Mujica. Si el árbol es un ciudadano, destaca Antonio De Lisio, "entonces tiene derecho a permanecer, derecho a que lo cuiden y evitar que se enferme". El árbol es un pretexto para la activación comunitaria, resalta Eduardo Cudisevich / Texto, fotos y videos: Vanessa Davies

Fecha:

Comparte:

En la vida y en la muerte están los árboles. En la paz y en la guerra están los árboles. Erguidos, se han enfrentado a mil batallas. Así lo cuenta el poema galés «La batalla de los árboles»: «Tosco y salvaje era el abeto/ Cruel el fresno/ No se desvía la medida de un pie/ Golpea directamente en el corazón». Hoy, les toca un nuevo escenario de lucha: el de las ciudades agobiadas por el calor, consecuencia del cambio climático.

Disgustos y alegrías ha logrado la bióloga y ambientalista Esmeralda Mujica en su lucha cotidiana por estos luchadores verdes. Mujica no llega a imaginar una ciudad sin árboles: «La comunidad de científicos sobre cambio climático tiene más de 40 años hablando sobre el aumento de la temperatura en el planeta, y todavía la gente no lo cree. ¿Nos vamos a quedar sin árboles?».

Lo ideal es tener 30 árboles, o más, por habitante, estima el ambientalista y profesor universitario Antonio De Lisio; preferiblemente que no pasen de los 15 metros de altura. En ciudades europeas hay 100, o más. De Lisio no conoce datos globales de Venezuela, pero sí manejó cifras del municipio Chacao según las cuales la proporción es de cuatro habitantes por árbol.

En el país «necesitamos árboles sanos, seguros y adecuados, y eso depende de políticas públicas, de las ordenanzas», subraya Mujica. Sanos, que no estén enfermos. Seguros, que no crezcan más de lo que impida su manejo.

Ciudadanos con derechos

El árbol debe ser visto como un ciudadano, plantea De Lisio. «Ha venido acompañando al ser humano. Hay un árbol de 1.700 años en España, por ahí pasó todo el mundo. Nosotros teníamos árboles emblemáticos, como la ceiba de San Francisco. Si se convirtieron en un referente urbano, ¿por qué no darles la condición de ciudadanos? El árbol tiene una vida de unos 50 años, aunque hay especies que duran más. Te acompaña mucho tiempo: 50 años son dos generaciones y media de personas, y puede dejar descendencia. Con esa base, el árbol es un acompañante que vemos, que está con nosotros, que nos dice que somos parte de la naturaleza».

Si el árbol es un ciudadano, destaca, «entonces tiene derecho a permanecer, derecho a que lo cuiden y evitar que se enferme», defender sus espacios, respetar sus raíces «y que el control radicular sea bien llevado y que no signifique secar el árbol».

Los árboles necesitan cuidados. «No se ha hecho una campaña de eliminación de tiña y guatepajarito, ni control fitosanitario permanente», señala. Las podas no son talas, advierte; deben ser controladas. «Deben ser las podas necesarias, las podas que garanticen la mejor sobrevivencia del árbol en zonas urbanas, que no lo desequilibren». Es un exabrupto que se poden las ramas de un lado y se dejen las de otro: «No puedo podar abajo sin podar arriba, los cortes en las ramas tienen que ser oblicuos y no verticales, porque si se hacen verticales se reduce el crecimiento y se altera el crecimiento».

Las talas son «cuando no queda más remedio, pero antes de talar debo ver si puedo llevar ese árbol a otro lugar y resembrarlo». En Caracas hay experiencias de trasplante, como el traslado de un caucho -mediante el empleo de grúa- que se encontraba en el lugar donde hoy se construye la Plaza del Inmigrante en Chacao. Esto ocurrió en 2015 y el árbol fue llevado al Parque Nacional Ávila o Waraira Repani.

Cada tala, advierte el ingeniero agrónomo Eduardo Cudisevich, libera carbono al ambiente. «Por eso es importante no solo tener árboles, sino mantenerlos».

El control fitosanitario debe hacerse, como mínimo, una vez al año. «Esa campaña no la puede hacer solo el municipio, pero sería un incentivo para que los colegios, las empresas actuaran», comenta Cudisevich. Las acciones fitosanitarias las podría hacer la propia comunidad «con orientación».

El árbol es un pretexto para la activación comunitaria, resalta el ingeniero, porque «nadie en su casa, viendo un canal por cable, va a solucionar el problema de las ciudades». El árbol es un punto de encuentro y de organización. «Nosotros podemos arborizar las plazas, mejorarlas; hemos perdido la activación comunitaria por lo cotidiano, y el árbol se convierte en un elemento estructurador». Hay campañas para las comunidades, campañas de responsabilidad social para las empresas que pueden ser promovidas por las alcaldías.

Podas con corazón

Una poda no debe ser hecha a lo loco, ni por cualquiera. Mujica insiste en que se debe capacitar a quienes están en contacto directo con los árboles. En primer lugar, a quienes hacen la poda, a los fiscales ambientales, a los alcaldes y gobernadores, al ente competente en la materia «porque pueden ser gerentes y no tener la información».

Como ambientalista, ella se ha puesto con las cuadrillas de tú a tú para reiterar dónde se debe hacer el corte para que no haya desgarro, «porque el desgarre de la corteza abre la vía para los agentes patógenos»; es decir, el árbol se debilita, se enferma. «Lo atacan hongos, insectos taladores, termitas».

El manejo fitosanitario debe incluir la eliminación de las ramas secas, «porque por allí entra el comején, la rama cae». También, sacar el guatepajarito, porque esta planta actúa como una sanguijuela que se va comiendo el árbol y lo seca. Su frase clave es: «Poda, no desgarres».

Mujica propone «un plan de arborización para las ciudades, con especies nativas que deben aguantar el calor que tenemos y el que nos viene, que se adapten al cambio climático». Eso, aclara, «es un proceso». Remarca el rol de las ordenanzas, pero «hay que hacerlas cumplir, que no sea tan burocrático».

Palabras van y vienen. Pero los árboles están. Siempre están.

Para contactarnos escribe a nuestro correo editorial [email protected]
Recibe la actualización diaria de noticias a través de nuestro Grupo WhatsApp 
Twitter | Instagram

━ más como esto

Tarek William Saab presentó sus nuevos poemarios en Puerto La Cruz

El sábado 13 de diciembre, en las inmediaciones de la plaza Bob Dylan del Parque “Andrés Eloy Blanco” de Puerto La Cruz, se realizó...

José Antonio Kast fue elegido como nuevo presidente electo de Chile

José Antonio Kast se convirtió este domingo en el nuevo Presidente electo de la República tras imponerse en el balotaje presidencial con cerca del...

Presidente Nicolás Maduro: “Hemos ajustado y perfeccionado nuestra visión del Sistema de Defensa Nacional”

Durante su intervención en la XXV Cumbre de Jefes de Estado del ALBA – TCP, el presidente venezolano alertó que estas acciones de EEUU...

Petro rechaza paro armado del ELN y pide a los colombianos pasar la Navidad sin miedo

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, rechazó este domingo el paro armado de tres días convocado por la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en...

Netanyahu relaciona ataque en Sídney con llamamiento de Australia a un Estado palestino

El primer ministro israelí, Bejamín Netanyahu, relacionó este domingo el «llamamiento a un Estado palestino» por parte de Australia con el tiroteo masivo en...