Alrededor de 46 personas que recibían alimentos, murieron por disparos del ejército israelí en dos incidentes en el sur de Gaza, de acuerdo a reportes del personal paramédico y rescatistas que trabajan en la zona
La Organización de la Naciones Unidas (ONU) han condenado el sistema de distribución de alimentos en esta región apoyando por Israel y Estados Unidos, y lo han considerado «una abominación» y una «trampa mortal».
La ONU ha dicho que más de 410 palestinos habrían muerto por disparos o bombardeo israelíes a la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), quienes comenzaron a operar a finales de mayo.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), indicaron que se había «identificado una reunión en un área adyacente a las tropas de las FDI que operan en el corredor de Netzarim».
Por otro lado, las autoridades de la GHF indicaron que «no hubo incidentes cerca de los lugares de reparto de comida durante esta mañana».
La GHF está oficialmente clasificada como una organización privada, está respaldada por Estados Unidos e Israel y no se conoce mucho sobre cómo se financia.
La ONU y otros grupos de ayuda humanitaria han rechazado colaborar con esta fundación, a la que acusan de cooperar con las metas de Israel en su guerra contra Hamás de un modo que viola los principios humanitarios.