Josué Lorca, ministro de Ecosocialismo (Ambiente) de Venezuela, sostuvo un encuentro con el secretario general de la OPEP, Haitham Al-Ghais, en paralelo a la cumbre del clima (COP29) en Bakú, Azerbaiyán, donde abordaron la promoción de tecnologías en un intento por reducir las emisiones en el sector petrolero.
El Ministerio de Ecosocialismo explicó, a través de una nota de prensa, que los funcionarios hablaron de puntos en común sobre la crisis climática, aunque se desconocen los detalles.
Asimismo, remarcaron la necesidad de que en la COP29 se materialicen metas de financiamiento, para que los países en desarrollo puedan anteponerse a los desafíos climáticos.
El lunes, la organización ecologista Greenpeace presentó en el marco de la COP29 una propuesta para implementar un impuesto global a las grandes empresas petroleras y de gas para financiar los costes de los crecientes desastres climáticos a través del fondo de pérdidas y daños de la ONU.
«Mientras las gigantes del petróleo y el gas siguen acumulando niveles grotescos de ganancias explotando recursos, los daños provocados por las operaciones de esta industria recaen desproporcionadamente en personas que no causaron esta crisis», declaró David Hillman, director de la organización coautora del análisis Stamp Out Poverty (Erradicar la pobreza) en un comunicado.
La iniciativa incluye un impuesto inicial a las grandes compañías de combustibles fósiles de 5 dólares (aproximadamente 4,74 euros al tipo de cambio actual) por tonelada de CO2 liberada, que se incrementaría gradualmente y que serviría para recaudar miles de millones de dólares en el horizonte de 2030.
Según los cálculos de Greenpeace y de Stamp Out Poverty, introducir esa tasa en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) podría recaudar unos 900.000 millones de dólares (unos 853.500 millones de euros).