El exembajador de Venezuela en Colombia, Gustavo Márquez, expresó este jueves su preocupación por el atentado que sufrió el candidato presidencial colombiano Miguel Uribe Turbay, al advertir que este hecho podría marcar una nueva fase de intensificación en la ya persistente violencia política en el país vecino.
Márquez afirmó que “Colombia nuevamente va hacia un proceso de violencia política. No es que haya desaparecido, siempre ha existido, pero esto está escalando a otro nivel”. Calificó el atentado como “muy grave”, especialmente por tratarse de un dirigente del Centro Democrático, partido fundado por el expresidente Álvaro Uribe Vélez.
El exdiplomático, quien habló con Contrapunto.com, también vinculó el hecho con las recientes declaraciones del presidente Gustavo Petro, quien denunció la existencia de un plan para atentar contra su vida. “Este atentado se da en el contexto de esa denuncia, y eso es muy preocupante porque refleja un clima de inestabilidad institucional y amenaza directa a la democracia colombiana”, apuntó.
Repercusiones en Venezuela y la región
Márquez destacó que la violencia en Colombia siempre ha tenido efectos colaterales en países vecinos como Venezuela y Ecuador. “Todo lo que ocurre en Colombia en términos políticos y sobre todo esta violencia, termina drenando hacia los países vecinos. Tenemos una interconexión muy viva a través de la frontera”, advirtió.
Según el exdiplomático, los hechos recientes podrían estar vinculados con una reacción de sectores ultraconservadores y de “la rancia oligarquía colombiana” contra el gobierno de Petro, «quien ha promovido reformas clave como la laboral, del sistema de salud y la agraria».
“Mientras no se aborde con seriedad el tema de la tierra, la propiedad y el uso de la tierra, problema estructural en la violencia colombiana, no va a haber una solución de paz duradera. Y mientras no haya paz en Colombia, Venezuela se verá afectada, como ha ocurrido históricamente”, sostuvo Márquez.
Llamado al diálogo y al respeto de los derechos
Finalmente, Gustavo Márquez hizo un llamado firme a la no violencia y al retorno a los mecanismos institucionales como vía para la resolución de los conflictos tanto en Colombia como en Venezuela.
“Debemos avanzar hacia el diálogo que nos permita volver a la Constitución, al estado de derecho, al respeto de los derechos civiles. No es posible seguir profundizando la represión, ni en Colombia ni en Venezuela”, concluyó.
El atentado contra Miguel Uribe Turbay, que aún se encuentra bajo investigación por parte de las autoridades colombianas, ha encendido las alarmas sobre la seguridad del proceso electoral en ese país, en medio de un clima político ya polarizado.