Este jueves 16 de noviembre, Pedro Sánchez ha salido victorioso tras la investidura que le otorgó 179 votos a favor y con ello, cuatro años más de gestión gubernamental en la que comienza la polémica tramitación de la ley de amnistía
La decisión de los diputados y el parlamento para votar a favor de Pedro Sánchez se sustenta básicamente en el proyecto de la llamada ley de amnistía que implica, como su nombre los indica, amnistiar todos los delitos cometidos «con la intención de reivindicar, promover o procurar la independencia de Cataluña», en el marco del referéndum de autodeterminación del 1 de octubre de 2017, así como de la consulta simbólica organizada el 9 de noviembre de 2014.
¿Qué implica la amnistía?
El texto afecta a los delitos de orden penal, administrativo o contable cometidos desde el 1 de enero de 2012, relacionados con el proyecto separatista. La futura ley absuelve tanto a los dirigentes o funcionarios catalanes que organizaron el referéndum de 2017, prohibido por la justicia, como a los militantes de base o simpatizantes que trataron de bloquear el acceso de las fuerzas del orden a los centros de votación.
La acción policial, que dejó algunas escenas de violencia en 2017, también está cubierta por esta amnistía. En cuanto se adopte la ley, Carles Puigdemont, expresidente del partido Junts, quien permanece como fugitivo, y a quien la justicia española sigue reclamando, podrá regresar a España, seis años después de su huida a Bélgica para esquivar los procesos.
Otros dirigentes separatistas como Oriol Junqueras, fueron condenados a amplias penas de prisión e indultados en 2021 por el gobierno de Sánchez. De ejecutar la ley de amnistía, éstos también verán desaparecer sus sentencias de inhabilitación activas hasta ahora. Los tribunales tendrán, como máximo, dos meses para aplicar esta amnistía y los recursos que se interpongan no serán suspensivos, indica la proposición de ley. Según una estimación de los impulsores del texto, la amnistía podría beneficiar a unas 400 personas quienes permanecen en la mira de los entes judiciales en el país.
Sánchez y el PSOE sustentan la amnistía
El candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, se mantiene firme ante la defensa de la ley de amnistía para los líderes independentistas, una medida «en el nombre de España, en el interés de España y en defensa de la concordia entre españoles.» El candidato del PSOE dejó claro que la amnistía se aprobará «bajo luz y taquígrafos, con total transparencia», en vista de las críticas de los detractores que lo acusan de promover la inconstitucionalidad y la división de España. «No será un ataque a la Constitución del 78, sino todo lo contrario, una muestra más de su fortaleza y vigencia», defendió Sánchez.
Cabe destacar que Pedro Sánchez ha pactado con los partidos catalanes de izquierda como Esquerra y Junts para obtener los votos que necesita en su investidura en el parlamento. Sánchez señaló que caben dos aproximaciones: la vía «de la imposición y de la crispación», que ha atribuido al PP, o «la vía del diálogo, el perdón y el entendimiento», que es en la que se sustenta su propuesta gubernamental. La amnistía, ha señalado, está impulsada «por la esperanza fundada» de que ayude «a superar una crisis de la que nadie puede estar orgulloso» y para que contribuya «a mejorar la convivencia» entre todos los españoles.
Partido Popular rechaza la ley y se opone a su ejecución
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha denunciado la «corrupción política» luego de la investidura de Pedro Sánchez tras pactar con los partidos de extrema izquierda como Junts y Esquerra, para obtener la totalidad de los votos. Feijóo señaló que ésta «nace de un fraude», en alusión a ese pacto «a escondidas» con los partidos catalanes fuera de España.
Núñez Feijóo sustenta todas sus críticas ante la ejecución de la ley de amnistía que según su opinión, perfilará el proyecto separatista de Cataluña con España, y aplicará el indulto a varios exfuncionarios de la política que permanecen en un estado de exilio político tras acusaciones severas en relación a sus vinculaciones con movimientos ilícitos y terroristas con la antigua ETA.
Los detractores se manifiestan
Lo cierto es que la propuesta para Ley de Amnistía indulta las causas abiertas al independentismo por terrorismo en la que la Audiencia Nacional investiga al expresidente de Junts, el catalán Carles Puigdemont y la secretaria general de ERC Marta Rovira, así como a los encausados por planificar actos de sabotaje. Quienes rechazan la ejecución de la ley salieron a las calles apoyando a los partidos y líderes derechistas de VOX y PP movilizando a más de 160 agentes de las Unidades de Intervención Policial y a los llamados antidisturbios que se desplegaron en las concentraciones convocadas a las puertas de la sede nacional del PSOE, en la calle de Ferraz de Madrid, contra de la ejecución de ley de amnistía y acusando a Pedro Sánchez de «venderse por 7 votos» para conquistar la investidura que puede darle la presidencia de España.
¿Qué dicen los internacionalistas?
Jean Paul Mertz, internacionalista y diplomático venezolano señala que la ley de amnistía en España nace a nivel jurídico en la época de transición entre el franquismo y el sistema actual.
-Se usó para tratar de blindar a los principales personajes del gobierno franquista. Nace en distintas organizaciones políticas de derecha que después van a desembocar entre varios grupos principales y la llamada asociación de víctimas del terrorismo, cuya finalidad es victimizar a las figuras de la dictadura y la represión militar en España. Con las nuevas estrategias de años de procesos electorales han surgido partidos políticos que se presentan como nuevos pero que se sustentan en antiguas políticas españolas en las que se auspicia el terrorismo y la ilegitimidad.
Eloy Torres, internacionalista venezolano nos presenta una visión más amplia.
«El tema de España es muy complicado, peligroso para la España de 2023. Lo que representa el líder del PSOE, Pedro Sánchez, no es un acto legítimo. Basta ver las distintas manifestaciones que ponen en evidencia las decisiones de este señor que han ido en contracorriente con la idea democrática que abrazó España luego de morir el dictador Francisco Franco.»
Torres destacó las posturas de Felipe González, Alfonso Guerra y otros líderes de partidos de izquierda que están en contra de esta fragmentación, «(…) de este Frankenstein, que si en la gestión pasada fue inamovible, en éste se va a mover al introducir un conjunto de solicitudes que de acuerdo a la alianza con el partido Junts, un proceso de autonomía y otro de referéndum, declarará la autonomía de Cataluña convirtiendo todo esto en un punto de partida para la grave crisis que va a acosar a España y de la cual, no sabemos cuales serán las consecuencias.»
Torres reiteró la incertidumbre de todo este proceso de investidura y de concesión de la ley de amnistía.
Hoy en día el presidente en funciones, Pedro Sánchez, quien se impuso por
una minoría ante Alberto Núñez Feijóo, colocando a la Constitución española en
un serio problema puesto que el rey está amarrado por razones constitucionales,
y eso no ha podido permitir que se desarrolle un proceso democrático que tumbe
las ambiciones de Sánchez quien se ha aliado con el diablo justamente para
poder mantenerse en el poder. ¿Es un acto legal?, Sí. Logró los votos de
diferentes facciones que en última instancia están en contra de España, en
contra de la comunidad española, y en contra de la Constitución española que se
formó en la década de los 70 y 80 del siglo pasado.
Lo único cierto es que Pedro Sánchez, para poder llegar al Congreso de los
diputados entró por la parte de atrás, cosa que representas una mala señal para
él mismo puesto que se presenta como un individuo poco querido y poco respetado
y poco apreciado que goza de una altísima ilegitimidad.
España se polariza
Los grupos de la izquierda y los socios de Sánchez, en minoría en el Senado y con mayoría en el Congreso, acusan al PP de ejercer «autoritarismo” y «filibusterismo» en la Cámara Alta y de practicar la devolución del «golpe por golpe» que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, prometió dar contra la ley de amnistía. Han coincidido además en criticar la tramitación exprés de esta reforma del Reglamento y reprochar que «la derecha y la ultraderecha» promuevan protestas en las calles en las que se han vivido escenas de violencia.
El Partido Popular y su líder, Núñez Feijóo, defienden una tramitación ordinaria y no urgente de la ley de amnistía y acusan a la izquierda de pretender evitar que acudan al Senado los jueces y expertos para que «no se conforme una opinión jurídica» que «les diga que es una aberración».
La amnistía es en definitiva para el PP, un «atropello» y un «engaño» para estar «cuatro años más en La Moncloa», por lo que se opondrá a ella con todos sus recursos. El PP expresó su rechazo a un posible referéndum de autodeterminación en Cataluña.
Lo cierto es que España se prepara para la amnistía de Pedro Sánchez y lo más probable es el devenir de los cambios profundos para España, sus leyes y una nueva conformación de Estado que pudiera comenzar un proceso de división tras la ejecución de otro referéndum separatista para Cataluña.
Con información de El País, EFE y CNN.
