La alemana Ursula Haverbeck, bautizada por la prensa local como la ‘abuela nazi’, murió a los 96 años este miércoles, según confirmó su abogado a la agencia DPA.
La mujer seguía negando hasta el final el Holocausto, asegurando en declaraciones públicas que Auschwitz era meramente un campo de trabajo donde no existían cámaras de gas ni exterminio de los judíos y demás .
Negación pública o respaldo del Holocausto y exterminio de los judíos bajo el régimen de Adolf Hitler es un delito que se penaliza con hasta cinco años de cárcel en Alemania. Condenada por primera vez en 2004, Haverbeck recibió una multa. Las sentencias más recientes, dictadas en Berlín, Hamburgo y Renania del Norte-Westfalia, la condenaron a prisión sin libertad condicional por empeñarse en sus declaraciones antisemitas.
La mujer fue condenada a seis meses de cárcel en 2017 en Berlín, y entre 2018 y 2020 pasó más de dos años en la prisión de Bielefeld.
En mayo de 2018 decidió no presentarse en el centro penitenciario por su propia cuenta, lo que generó una persecución policial, mientras fue descrita como prófuga de la justicia por casi una semana, hasta que fue hallada en su propia casa.
En 2022, un tribunal de Berlín sentenció a Haverbeck a un año de prisión sin libertad condicional por incitación al odio, y la última condena —de un año y cuatro meses de prisión, con cuatro meses considerados como cumplidos debido a demoras procesales— se dictó en junio de este año en Hamburgo. El abogado de la mujer presentó una apelación contra ese fallo.
Asimismo, la anciana permaneció en libertad hasta su muerte, haciendo caso omiso a las estimaciones de los historiadores de que los nazis asesinaron a al menos 1,1 millones de personas tan solo en el campo de concentración de Auschwitz.