Los gobiernos de España, Francia y Grecia presentaron una iniciativa conjunta ante la próxima reunión de ministros de telecomunicaciones de la Unión Europea para fijar en 16 años la edad mínima para acceder a las redes sociales, según la Agencia EFE
El documento plantea la implantación de mecanismos comunes en toda la UE que permitan asegurar que solo los usuarios de 16 años o más puedan registrarse en plataformas como Facebook, Instagram, TikTok o X (Twitter). Para ello, exigiría a los operadores el desarrollo de sistemas de comprobación de edad en todos los dispositivos con acceso a internet
La propuesta incluye la obligación de incorporar de fábrica en teléfonos, tabletas y ordenadores aplicaciones de control parental que permitan a las familias supervisar y limitar el uso de redes sociales por parte de menores. Al mismo tiempo, impondría a las plataformas ajustar sus interfaces para usuarios de entre 16 y 18 años, eliminando o desactivando funciones persuasivas —como la reproducción automática de vídeos, ventanas emergentes o recomendaciones algorítmicas intensivas— que fomentan un uso prolongado.
España, Francia y Grecia recuerdan que el Reglamento General de Protección de Datos ya establece protecciones específicas para los menores y que la Ley de Servicios Digitales (DSA) obliga a las redes a transparentar sus algoritmos y a no dirigir publicidad personalizada a usuarios no adultos. El texto remitido a Luxemburgo no fija aún la cifra definitiva, sino que abre el debate entre Los Veintisiete para su aprobación antes de finales de año.
Antecedentes nacionales
- España aprobó en 2024 un anteproyecto de ley para elevar a 16 años la edad de acceso y sancionar penalmente a las redes que no lo verifiquen.
- Francia implantó en abril un sistema de verificación de edad en todas las web de contenido para adultos; el presidente Macron respalda además prohibir móviles a menores de 11 años y redes antes de 15.
- Grecia puso en marcha en 2023 una estrategia nacional de protección infantil online, con formación para familias y herramientas de supervisión.
La iniciativa busca armonizar a nivel europeo las herramientas técnicas y legales necesarias para reducir los riesgos de adicción y exposición de los menores a contenidos inapropiados, manteniendo al mismo tiempo el potencial educativo y social de las redes.