Sacar a Rusia del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas agrava la crisis y se puede ir a otro nivel de la escalada militar; incluso, el uso de armas nucleares, alertó el analista Carlos Romero.
No creo que se use el arma nuclear, pero sí se va a usar como amenaza, consideró Romero.
Rusia ha convertido esta guerra en una guerra total que no respeta a refugiados ni a civiles, planteó. Mientras más se prolongue la guerra, peor será para Rusia; Putin concibió la invasión como una operación terrestre y militar, y Ucrania y sus aliados respondieron con una estrategia de guerra moderna.
Putin concibió la invasión al estilo clásico, y se encontró con un presidente que es «un malabarista en materia mediática», con el uso de los medios como actividad fundamental en lo militar. Putin tampoco imaginó un apoyo activo de Occidente a favor de Ucrania.
ES difícil encontrar un escenario de negociación en este momento, razonó en entrevista con Unión Radio. Cada quien está en una actitud ofensiva.
La expulsión es una decisión mayoritaria con dos características: Ha crecido el rechazo a la invasión y se fortalece el aislamiento de Rusia, estimó.
La CPI debería abrir un expediente sobre el caso de Bucha.
El Consejo de Seguridad pudiera discutir el tema, eso lo puede hacer cualquier miembro (incluso los no permanentes); y en la decisión se aplica el derecho a veto, recordó. Pero hay un movimiento en la ONU para que la asamblea general elimine el derecho a veto en el Consejo de Seguridad.






