Entre víctimas, emergencia sanitaria, confinamiento y crisis alimentaria, los ciudadanos siguen siendo los más afectados
En América Latina y el Caribe, el virus sigue su avance y suma 8.912 fallecidos y 178.627 contagiados. Se espera que los casos sigan aumentando: la región está como «Europa hace seis semanas», advirtió el martes el subdirector de la Organización Panamericana de Salud (OPS), Jarbas Barbosa.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) advirtió que la pandemia traerá un incremento del hambre y la pobreza en los países de la región, y subrayó que la inseguridad alimentaria es aguda en Venezuela, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Haití.

En Brasil, que el martes superó el umbral de los 5.000 muertos entre 71.886 casos -el más golpeado de la región-, la distribución de alimentos y artículos de higiene en una favela del norte de Rio de Janeiro fue interrumpida por tiroteos.
En Bolivia, la presidenta interina, Jeanine Áñez, llamó a una jornada de «ayuno y oración» frente a la pandemia, que ha matado hasta ahora a 53 de sus compatriotas e infectado a más de mil.

En Panamá, el coronavirus se cobró el puesto del viceministro de la Presidencia, Juan Carlos Muñoz, quien debió renunciar tras la fallida compra de un centenar de respiradores por cerca de 5,2 millones de dólares. El caso está siendo investigado por la fiscalía por presunto peculado.
Asimismo, Perú abrió una investigación por presunta corrupción en la compra de elementos de protección para la policía, tres días después de la destitución del ministro del Interior y del comandante de la institución.
Con información de AFP






