En la ofensiva se emplearon más de 100 municiones guiadas a más de 60 objetivos
Los hutíes de Yemen prometieron no dejar «sin respuesta ni castigo» los ataques de Estados Unidos y el Reino Unido contra su territorio, de acuerdo con un comunicado emitido el pasado viernes.
«El enemigo estadounidense-británico, como parte de su apoyo a la continuidad de la delincuencia israelí en Gaza, lanzó una brutal agresión contra la República de Yemen con 73 ataques dirigidos a la capital, Saná, y a las gobernaciones de Hodeidah, Taiz, Hajjah y Saada», señalaron, destacando que el ataque dejó un saldo de cinco muertos y seis heridos.
Los rebeldes de Yemen amenazaron con atacas las “fuentes de amenaza y todos los objetivos hostiles“ en mar y tierra en defensa de su territorio, responsabilizando a Estados Unidos y el Reino Unido de “su agresión criminal contra nuestro pueblo y no quedará sin respuesta ni castigo“.
El grupo afirmó que continuará con su ofensiva en una de las vías marítimas más importantes del mundo hasta que Israel ponga punto final al ataque contra Hamás en la franja de Gaza.
Este viernes, EE.UU. y el Reino Unido lanzaron varios ataques contra las posiciones de los hutíes en Yemen. Joe Biden, presidente norteamericano, explicó que la ofensiva contó con el apoyo de Australia, Baréin, Canadá y los Países Bajos, e indicó que fueron bombardeados «objetivos en Yemen usados por los rebeldes hutíes para poner en peligro la libertad de navegación en una de las vías marítimas más vitales del mundo».
De acuerdo con las Fuerzas Armadas norteamericanas, en el ataque se emplearon más de 100 municiones guiadas con precisión para atacar más de 60 objetivos de los hutíes en 16 lugares distintos de Yemen
«Estos ataques estuvieron compuestos por ataques aéreos y marítimos de la coalición y activos de apoyo de toda la región, incluidos aviones del Comando Central de las Fuerzas Navales de EE.UU. y misiles de ataque terrestre Tomahawk lanzados desde plataformas superficiales y subterráneas», informó la Central de la Fuerza Aérea de Estados Unidos (AFCENT, por sus siglas en inglés).
Por su parte, Rishi Sunak, primer ministro del Reino Unido, indicó que los ataques en conjunto con Estados Unidos contra objetivos terrestres hutíes en Yemen fueron un acto de «defensa propia».