El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el domingo que Rusia y China estarían llevando a cabo pruebas nucleares en secreto, lo que, según él, justifica la reanudación de ensayos explosivos por parte de su país tras más de tres décadas de suspensión.
Durante una entrevista en el programa “60 Minutes”, Trump afirmó: “No quiero ser el único país que no prueba”, en referencia a su reciente orden al Pentágono para iniciar pruebas nucleares, algo que Estados Unidos no realiza desde 1992.
El mandatario explicó que su decisión busca establecer condiciones de igualdad con Rusia y China, países que, según registros públicos, no han efectuado detonaciones nucleares en décadas. Sin embargo, Trump sostuvo que ambos gobiernos estarían realizando pruebas de manera encubierta. “Rusia está probando, y China está probando, pero no hablan de eso”, dijo. “Sabes, somos una sociedad abierta. Somos diferentes. Hablamos de eso”.
Más temprano ese mismo día, el secretario de Energía, Chris Wright, indicó que los planes presidenciales se limitaban a “pruebas de sistemas” y no incluían explosiones nucleares. No obstante, Trump expresó una postura más contundente en la entrevista: “Vamos a probar armas nucleares como lo hacen otros países, sí”.
La declaración marca un giro significativo en la política nuclear estadounidense, que desde 1992 ha mantenido una moratoria sobre pruebas explosivas. La última prueba atómica subterránea registrada por EEUU tuvo lugar en el sitio de pruebas de Nevada el 23 de marzo de 1955.
El anuncio ha generado inquietud en la comunidad internacional y reavivado el debate sobre el control de armas nucleares y la transparencia en los programas militares de las principales potencias.






