Rusia considera que el colapso del Gobierno de Bangladés tras la inesperada renuncia de la primera ministra, Sheikh Hasina, a causa de multitudinarias protestas, es un asunto interno de ese país y expresa su confianza en el retorno a la normalidad constitucional.
«Moscú considera que el cambio de fuerzas políticas que controlan el poder en Bangladés es un asunto interno de ese país, y espera un pronto retorno de los procesos políticos internos de ese Estado amigo a la normalidad constitucional», indicó el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
La entidad diplomática constató que en estos momentos la situación está bajo control de las Fuerzas Armadas de este país.
«Se supone que próximamente se conformará un Gobierno de transición», añadió Exteriores, según el cual, durante los disturbios ningún ciudadano ruso resultó herido.
La renuncia de Hasina, una de las gobernantes más veteranas del sur de Asia, empujada por un movimiento estudiantil que estalló hace más de un mes, se concretó este lunes tras dos semanas de intensa agitación que causaron más de 300 muertos.
Hasina, acompañada por su hermana menor, Sheikh Rehana, huyó a la vecina India y por el momento no ha hecho declaraciones a los medios ni publicitado sus planes futuros.
Respecto al futuro Gobierno de Bangladés, el Ejército afirmó haber mantenido una reunión con representantes de los principales partidos del país asiático como la Liga Awami de Hasina, así como el opositor Partido Nacionalista de Bangladés (BNP) y el mayor partido islamista, Jamaat-e-Islami, que fue ilegalizado la semana pasada.