El Gobierno de la República Popular China anunció una importante medida diplomática que beneficiará a varios países del continente americano: la eliminación del requisito de visado para sus ciudadanos que deseen ingresar a territorio chino por motivos de turismo o negocios de corta duración.
La iniciativa, que entra en vigor a partir del 1 de junio de 2025, permitirá a los ciudadanos de Brasil, Argentina, Chile, Perú y Uruguay ingresar a China sin necesidad de visado por un período de hasta 30 días. La decisión busca dinamizar el intercambio turístico, comercial y cultural entre China y América Latina, región con la que el país asiático ha venido estrechando vínculos estratégicos en los últimos años.
Según el comunicado oficial emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de China, la política forma parte de un plan más amplio para “facilitar el intercambio de personas, estimular el desarrollo económico conjunto y profundizar la cooperación Sur-Sur”.
Las autoridades chinas han subrayado que esta flexibilización se aplicará exclusivamente a estancias de corta duración y no exime del cumplimiento de otros requisitos migratorios. Además, queda excluida cualquier actividad laboral o de residencia prolongada.
La noticia fue recibida con entusiasmo en los países beneficiados, donde sectores turísticos y empresariales ven la medida como una oportunidad para fortalecer la presencia en el mercado asiático y atraer inversiones.
A pesar del anuncio, varios países latinoamericanos, como Colombia, Ecuador, Bolivia y Venezuela, no fueron incluidos en esta primera fase de exención de visados, lo que ha generado expectativa sobre futuras ampliaciones del acuerdo.
China ha consolidado su posición como uno de los principales socios comerciales de América Latina, con una inversión creciente en infraestructura, energía, minería y tecnología. Esta decisión se alinea con la estrategia del país asiático de promover una conectividad más fluida y directa con la región.