«El Conde» sentencia que su ventaja como candidato es que no tiene «enemigos». Asegura que su enemigo «no es Maduro, no es González Urrutia, es la miseria, el hambre, y el desempleo y la desesperanza que están viviendo nuestros venezolanos
Benjamín Rausseo, mejor conocido como «El Conde del Guácharo», pasó de ser humorista y empresario a cumplir la palabra que fue chiste en muchos de sus shows, quiere ser presidente de Venezuela y está corriendo la carrera por la silla de Miraflores.
A muchos venezolanos les cuesta hacerse la nueva imagen que busca vender al separase del personaje chistoso que le ha acompañado desde hace 40 años, sin embargo, asegura que no le molesta si lo llaman Benjamín o Conde, revela que son complemento el uno para el otro. Si nos metemos en su lado humano reconoce que le ha costado renunciar a ser «El Conde».
Acompañado de quien fue su músico en shows por más de 35 años y ahora asistente; y por uno de sus asesores, llega a la sala de redacción de Contrapunto para concedernos entrevistas como candidato presidencial. Entra y saluda con su particular tono de voz y busca empatizar con el equipo periodístico y de producción.
Compartimos un café negro, sin azúcar para él, e iniciamos una conversación en la que su asesor no se aparta, lo acompaña, como quien guía los pasos aunque se mantiene siempre en silencio.
A Rausseo le resulta más fácil hablar de temas económicos, del rumbo que le daría al país en materia de educación o qué haría con Pdvsa, demuestra y deja claro que es empresario, no duda en introducir un eslogan de campaña.
Sin embargo, al hablar de temas sensibles como el aborto, la eutanasia o el matrimonio igualitario, no se siente tan cómodo, pone en evidencia que él no lo apoya, pero que respeta el derecho, avisa que no lo promovería y cree que es una «cosa» que los interesados deben buscar por la vía legislativa, le manda la pelota a la Asamblea Nacional.
Para descubrir más a El Conde o Benjamín Rausseo, lea nuestra conversación completa.
–¿Cómo resolvería el tema salarial?
–El candidato que venga poniendo una cifra no está ajustado a la realidad. Recuerda que vamos a encontrar un país del que no sabemos cómo están sus finanzas y debido al alto porcentaje de personas que trabajan en el gobierno o cobran, porque hay unos que trabajan y otros que cobran, la nómina es muy grande. Hay que ver con qué nos encontramos. Esto es como encontrar una empresa quebrada y lo primero que tienes que ver es cuánto debemos, cuánto nos deben, qué tenemos en caja y cual es la proyección de los ingresos futuros.
–¿No puede hablar de una cifra?
–De una cifra no, lo que sí considero, pienso firmemente que hay que equiparar el salario al promedio latinoamericano.
–¿Mantendría el sistema de bonos?
–No solamente lo mantendría sino que lo perfeccionaría porque el bono está siendo politizado, pero el bono en realidad es un subsidio porque la gente no tiene un salario digno, decente y suficiente, por eso yo quiero cambiar la palabra trabajo por empleo. Cuando tu generas empleo, un empleo es sinónimo de un ingreso que va a ser superior al egreso, ahí es cuando se produce el ahorro. Los bonos hay que revisarlos, yo creo que debería ser un salario digno, decente y suficiente, incluso estamos proponiendo algunas reformas en la Ley del Trabajo que pueda haber una dualidad de pagos, que pudiera ser el pago fijo por mensualidad o quincena y el pago por hora.
–En el país hay presos políticos… ¿Cuál sería el trato que usted les daría?
–No debería haber en ninguna parte presos políticos, presos de conciencia. Creo que todos esos presos políticos deben ser puestos en libertad una vez que se cumplan los pasos. Lo que yo no puedo como candidato y luego como presidente es decir que al día siguiente de yo ganar voy a poner a los presos políticos fuera, primero porque no le corresponde al presidente electo sino cuando entre en funciones.
–¿Pero usted sí liberaría a los presos políticos?
–Claro pero una vez que entre en funciones, yo no, Benjamín Rausseo como presidente no libera a los presos políticos, Benjamín Rausseo como presidente hará todo lo que sea necesario ante los tribunales y la Fiscalía para que esa gente salga en libertad y sean juzgados en libertad o se les juzgue y se les condene.
–¿Cómo lograría que profesores y maestros vuelvan a las aulas más allá de mejorar salarios?
–El atractivo de un empleo, en este caso es la pasión de los maestros por enseñar, eso va más allá del dinero. El maestro vuelve a las aulas el día que tenga condiciones. Decía Luis Beltrán Prieto Figueroa: «Maestro con hambre no enseña, alumno con hambre no aprende». Los maestros deben ser tratados con la mayor consideración porque ellos son los que están formando las nuevas generaciones, la semilla del nuevo venezolano está en la responsabilidad de los maestros. Debemos basar la nueva Venezuela estrictamente en la educación. Si resolvemos todos los problemas y no resolvemos el de la educación no habremos resuelto nada.
–¿Cuál será el rol de la Fuerza Armada dentro de su gobierno?
–El que está establecido en la Constitución y las leyes, yo tengo que respetar a las Fuerzas Armadas, las Fuerzas Armadas me van a respetar a mi como primer mandatario del país y, eso sí, hay que trabajar mucho en compañía de ellos para mejorar las condiciones, sueldos y las condiciones sociales de la tropa así como la dotación y que ellos se sientan seguros de que están sirviéndole al país porque el país le sirve en alguna manera a sus familias entorno a la salud, educación de su gente, porque cada soldado representa una familia y esa familia sufre lo mismo que sufren todas las familias.
-¿Cómo serían las relaciones con Irán, Rusia, China, Nicaragua, Cuba y Estados Unidos?
–Con todos los países las relaciones internacionales serán apegadas al derecho internacional, de cooperación comercial y cultural, respetaremos todos los acuerdos que se hayan firmado con todos los países hasta ahora, siempre y cuando no se dañe ni se perjudique los intereses de la nación.
-¿Cómo resolvería el financiamiento al país?
–Necesitamos grandes cantidades para el arranque, sin embargo, hay un tema bien interesante que yo he dicho que el resultado de las elecciones debe ser muy claro y mientras más observadores haya mejor. Pero el primer observador es el venezolano que vota y cuida (…) El venezolano que salga electo debe ser reconocido dentro y fuera del país, al haber legitimidad en el nuevo mandatario, que toma posesión en enero de 2025, se caen todas las trabas que habían porque ha habido dudas sobre la legitimidad del mandatario.
-¿Usted cree que la legitimidad de Maduro está en entredicho?
–Es una lógica internacional que lo ven así algunos países, no todos, pero hay países como Reino Unido que tiene más de 3.500 millones de dólares en oro, o sea los tiene represados porque no lo reconocen. Asimismo tenemos fondos en el Banco Interamericano de Desarrollo, líneas de crédito en la Corporación Andina de Fomento, hay mucho dinero que va a entrar al país para el inicio.
–¿Promoverá el uso del dólar?
–No hace falta promoverlo, ya está circulando, yo más bien hablo de flexibilización cambiaria, que la gente pueda comprar en dólares, en euros y próximamente en bolívares en la medida que el bolívar cobre fuerza y el venezolano vuelva a confiar en su moneda. Eso pasa primero por la autonomía del Banco Central, el BCV sirve al Estado no al gobierno. La política monetaria es algo muy serio y debe ser manejado sin injerencia política. Con nosotros el bolívar volverá a ser el bolívar.
-¿Qué hará con el CLAP?
–Si tú tienes un empleo digno, decente y suficiente, tú no necesitas que te den una bolsa porque se supone que tú ganas bien (…) Los subsidios existen en todas partes, pero aquí se politizó y se condiciona recibir o no la bolsa del CLAP porque está politizado. Yo le quitaría la política, mejoraría, no la llamaría bolsa CLAP, sino que la mejoraría hasta que la gente no necesite más una bolsa CLAP y la gente tenga dinero suficiente en su cartera para que pueda -no que le manden un arroz, unos frijoles con gorgojo o sin gorgojo- con su dinero hacer su compra y que diga ya no necesito la bolsa, désela a otra persona. Pero siempre tiene que quitarle ese elemento político que le ha hecho mucho daño, tanto a la salud pública como a la alimentación.
-¿Está de acuerdo con privatizar Pdvsa?
–En absoluto. Sería irresponsable. Si nosotros vamos a vender un carro tenemos que venderlo en las mejores condiciones. ¿Cuánto nos pueden dar ahorita por Pdvsa? Pdvsa ahorita está tan bajo en precio que debe más de lo que nos van a dar por privatizarla. No hace falta privatizarla, Pdvsa es una empresa que es como un símbolo para nosotros y lo que necesitas es hacer alianzas con las grandes corporaciones petroleras y creo que de esa manera, si hay reglas claras y hay confianza en el capital que va a venir aquí que no va a ser expropiado, la gente va a venir a invertir, no solamente en petróleo sino en generación y distribución eléctrica.
–Aborto, eutanasia y matrimonio igualitario ¿Sí o no?
–Yo soy un hombre provida, mis principios cristianos no permiten opinar en eso. Creo que ya la ley establece cuáles son los límites de eso. Si los que están interesados en el tema y quieren profundizar más en el tema del aborto, ahí está la Asamblea Nacional y pueden proponer cambios para que ellos cumplan sus deseos. Yo no estoy de acuerdo con eso, tengo cinco hijos. Nosotros fuimos siete hermanos, independientemente de nuestra situación económica mis padres nos tuvieron a todos nosotros, sin embargo, están contempladas excepciones, pero ya están establecidas en la ley.
Al referirse a la eutanasia lo define como «un tema bien complejo. Ha pasado mucho tiempo con la gente tratando de imponerlo y sin embargo los resultados han sido pírricos para los que lo han propuesto, pero te recuerdo, no es lo que piense Benjamín Rausseo, es lo que piense la mayoría porque yo no puedo imponer lo que yo pienso con lo que piensa una minoría, Yo respeto las minorías, pero también respeto la voz de la mayoría».
«El matrimonio igualitario es una cosa en la que, independientemente de la forma de pensar de cada quién, el Estado no se mete, no se debe meter en lo que pasa puertas adentro de una casa, de un hogar conformado con la pareja que sea. Lo que sí nosotros podemos garantizar es que nuestro gobierno estará para defender sus derechos civiles basándonos siempre en la dignidad humana.
-¿Usted impulsaría entonces que haya matrimonio civil igualitario en Venezuela?
–Yo no puedo impulsar eso. Hay grupos que están interesados en impulsarlo, y repito, para eso están las leyes. La palabra matrimonio tiene un origen etimológico que establece hombre y mujer. La ley venezolana reconoce el matrimonio entre un hombre y una mujer, sin embargo, como cambian los tiempos y estamos en esa discusión que está muy en boga, yo les propongo a los grupos que están interesados en este tema que hagan su proyecto, lo llevan a la Asamblea Nacional, se somete a consulta y de ahí pa´ lante lo que diga la mayoría que es lo que se tiene que respetar.
–¿Benjamín Rausseo es de izquierda, centro, derecha?
–Centro con sentido social con un amplio respeto a la propiedad privada y un amplio respeto a la dignidad humana que eso es lo que queremos brindarle a todos.
-¿A Benjamín Rausseo le ha costado separarse de «El Conde»?
–No ha sido fácil porque El Conde del Guácharo, el personaje que cree hace 40 años, ha vivido conmigo tanto tiempo que ya es parte de mi, de mi esencia y la gente ve al Conde del Guácharo. El Conde del Guácharo está presentando a Venezuela al que lo interpretó que es Benjamín Rausseo y la gente está conociendo a través del Conde a Benjamín Rausseo. Ya través de Benjamín Rausseo está conociendo las propuestas de una Venezuela posible, una Venezuela donde primero esté la parte social.
–¿Por qué hay que votar por usted?
–Tiene que votar por la tarjeta del CONDE que está en el medio del tarjetón muy cerca de tu corazón. Porque soy independiente, no pertenezco a ningún cogollo, el único cogollo que me acompaña es el cogollo del Conde del Guácharo que está en el recuerdo, en el colectivo urbano. Tengo proyecto, tengo un plan, tengo la vista clara. Sueño con telemedicina, tenemos experiencia en medicina privada, vamos a aplicar los conocimientos de la medicina privada al alcance de todos. Estamos hablando de recuperar los Barrio Adentro y que se conviertan en centros de asistencia primaria y no usarlos como trampolín político. una educación bilingüe con un bachillerato técnico con conocimientos de producción. Otra cosa, soy independiente, no tengo nada que ver con el pasado, voy por la calle del medio, invito a toda la gente a pasar la página para construir una nueva Venezuela; y lo más importante, vengo del arte y la gerencia. Venezuela necesita gerencia en todo los niveles de la administración pública y yo he pagado nómina. No he pertenecido a ninguno de los dos grupos que durante 25 años han estado en pugna.
-Dijo que declinaba si Edmundo González iba a un barrio. ¿Todavía estudia esa posibilidad?
–O él estaría estudiando declinar a mi favor si voy a Los Palos Grandes o para Cumbres de Curumo. Cuando yo dije en La Vega (barrio de Caracas), es la Venezuela profunda, después de La Vega nosotros hemos ido ya a 60 barrios en Caracas y en el interior. Cuando él vaya para La Vega que me avise y lo espero.
-¿Y se echan un partida de dominó?
–Y conversamos, yo no tengo problema. La ventaja mía como candidato es que yo no tengo enemigos ni adversarios, para mi el enemigo no es Maduro, no es González Urrutia, es la miseria, el hambre, y el desempleo y la desesperanza que están viviendo nuestros venezolanos.