El mandatario se impuso hasta el próximo sábado para anunciar su decisión sobre el aumento de las tasas a esas importaciones, las cuales ha justificado por razones de seguridad nacional
El presidente de EE.UU., Donald Trump, postergará seis meses su decisión sobre la imposición de aranceles a la importación de vehículos con que ha amenazado a la Unión Europea (UE) y Japón, informó este miércoles la cadena de televisión CNBC.
El medio especializado, que citó «varias fuentes» que no identifica, aseguró que la decisión responde a un deseo de no ampliar sus enfrentamientos comerciales con sus aliados en momento en que está enzarzado en una agria guerra arancelaria con China.
El mandatario además se enfrenta a la oposición de amplios sectores del Congreso, incluidos elementos de su propio partido, el republicano, y de los mismos fabricantes de vehículos.
El Gobierno de Trump se ha impuesto hasta el próximo sábado para anunciar su decisión sobre el aumento de los aranceles a esas importaciones, que ha justificado por razones de seguridad nacional, o si la pospone otros seis meses mientras prosiguen las negociaciones con la Unión Europea y Japón.
Los aranceles han encontrado una fuerte oposición en el Congreso y la Casa Blanca se ha negado a suministrar al presidente del Comité de Finanzas del Senado, el republicano Chuck Grassle, el informe del Departamento de Comercio que argumenta las mencionadas razones de seguridad nacional.
El informe del Departamento de Comercio aludió a esas mismas razones de seguridad nacional cuando el año pasado impuso tarifas arancelarias sobre las importaciones de acero y aluminio de la UE, China, Canadá, México, Rusia y otros países.
En una comparecencia este miércoles ante el Subcomité de Asignaciones Presupuestarias del Senado, el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, dijo que el gobierno de Trump «está haciendo progresos» para la resolución de los aranceles impuestos a la importación de aluminio y el acero desde México y Canadá.
La Alianza de Fabricantes de Vehículos Automotores de EE.UU. ha señalado que «la imposición de tarifas sobre los vehículos y repuestos importados sería un error con consecuencias significativas», tanto para la industria como para sus trabajadores.
La UE ya ha anunciado que tiene confeccionada una lista de gravámenes que puede imponer a la importación de productos estadounidenses como represalia si Trump aplica su incremento de tarifas a la entrada en EE.UU. de vehículos europeos.