A pesar de que la tasa de inflación y el tipo de cambio fueron similares en 2019, el fenómeno de apreciación del tipo de cambio sigue encareciendo la vida del venezolano
Inflación y dólar son dos elementos de la economía que el venezolano de a pie ha tenido que aprender a sobrellevar, y es que los movimientos en uno y otro afectan indiscutiblemente al bolsillo, especialmente durante el 2019 cuando comenzaron a circular con más presencia los dólares en el mercado. Pero, ¿quién lleva la delantera en esta interminable carrera entre precios y tipo de cambio?
Este lunes 13 de enero la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional publicó su acostumbrado reporte de inflación, en este caso correspondiente al balance del año 2019, en el que destaca un acumulado 7.374,4%.
Con esta cifra, la inflación acumulada 2019 se ubica ligeramente por encima del incremento del dólar ese mismo año, el cual se ubicó en 7.584,9%, ya que inició el año 2019 en Bs 730,29 de acuerdo con la tasa de Dolar Today y 12 meses después, al cierre del lunes 30 de diciembre, ubicarse en Bs 56.122,06 según la cuenta en Instagram @enparalelovzla.
Aunque la brecha entre el dólar y la inflación se ha reducido en comparación con los últimos años, el economista y profesor del Instituto de Estudios Superiores en Administración (Iesa), José Manuel Puente, aseguró que ya existía un fenómeno denominado apreciación de tipo de cambio.
«Cuando existe el diferencial entre inflación y tasa de depreciación se da un proceso de apreciación del tipo de cambio que implica que el valor del tipo de cambio actual está muy por debajo de su valor de equilibrio», explicó en entrevista con Contrapunto.
En ese sentido, el economista señaló que a pesar de que las dos tasas fueron similares en 2019, ya existía una apreciación en el tipo de cambio que proviene de mantener «artificialmente controlado» por muchos años el tipo de cambio y no permitir que se ajustara al ritmo de la inflación para mantener la paridad de los precios internos frente a los externos.
El profesor del Iesa insistió en que independientemente del momento en el que el tipo de cambio de equilibrio se ubicó en su valor real, durante los últimos años se ha presentado una apreciación del tipo de cambio porque la inflación evolucionó a una velocidad mucho más alta que la tasa de depreciación.
Una de las consecuencias de este fenómeno, indicó, es que el país se vuelve muy caro en bolívares y muy caro en dólares, por esa razón, hace tres años con 20 dólares una familia podía «resolver» y ahora no.
Puente advirtió que en Venezuela todos los precios están distorsionados y el tipo de cambio, elemento clave en la economía, no es la excepción, y actualmente se encuentra «abiertamente apreciado», lo que significa que se puede esperar que la depreciación continúe hasta que se genere un punto de equilibrio con su valor real.
Finalmente, aseveró que este fenómeno forma parte de un círculo vicioso en el que la hiperinflación genera mayor apreciación en el tipo de cambio, porque el problema de fondo sigue siendo que la gestión económica debe generar un esquema cambiario y una política fiscal y monetaria coherente que logre eliminar la hiperinflación y haga que la evolución de precios en Venezuela converja con los del resto de América Latina.