Datos obtenidos por Reuters reflejaron que el Centro de Refinación Paraguaná producía unos 94.000 bpd hasta el domingo, cifra que representa el 10% de su capacidad instalada
Una de las unidades de destilación de la refinería Cardón, la segunda más grande de Venezuela, quedó paralizada el pasado sábado tras registrarse un incendio que sería posteriormente controlado sin dejar víctimas.
Según informó la agencia de noticias Reuters, para la mañana de este lunes un trabajador del Centro de Refinación Paraguaná, confirmó que la planta destiladora CD2 de la refinería, afectada por el incendio, seguía detenida.
Detalló que durante el fin de semana la destiladora estaba en condiciones inseguras y presentaba una fuga de gasoil.
Una de las bombas de la unidad destiladora «perdió succión, se le fue muy alta la temperatura de tope y con las fugas que había, se prendió (en fuego)», situación que fue atendida sin dejar heridos, explicó otro trabajador del lugar a la agencia.
Antes de detenerse, la unidad destiladora estaba procesando 50.000 barriles de petróleo diarios. Sin embargo, tras la eventualidad, Cardón quedó trabajando con una sola destiladora en servicio, la CD3.
El martes, una de las cinco destiladoras de la refinería Amuay se detuvo debido al bajo inventario de crudo, señaló un reporte al que tuvo acceso Reuters, quedando en servicio solo una unidad de destilación, mientras que las otras ya estaban detenidas por distintas fallas.
El Centro de Refinación Paraguaná producía unos 94.000 bpd hasta el domingo, cifra que representa el 10% de su capacidad instalada. Sus dos plantas de craqueo catalítico, claves para la producción de combustible, siguen detenidas.
Únicamente el el reformador de nafta de Cardón, para gasolina de alto octanaje, se encuentra en funcionamiento.