Los economistas Francisco Contreras y José Miguel Uzcátegui explican la dificultad de ajustar los servicios en Venezuela, además del permanente suministro irregular de gasolina
El economista Francisco Contreras aseguró que la administración de Nicolás Maduro no cuenta con los recursos para mantener el funcionamiento adecuado de los servicios públicos en el país.
«Es inevitable que el precio de estos servicios se ajuste, porque ya el Gobierno no tiene manera de mantenerlos en su mínimo de eficacia», afirmó Contreras.
Asimismo, señaló que ajustar los baremos de los servicios crea una dificultad en el control de los montos legales; sin embargo, expresó que «si no se ajustan van a tener una pesada carga sobre la sociedad».
«No es un asunto de si estamos de acuerdo o no, porque a la larga cuando no se hacen, la respuesta del mercado posterior es mucho más costosa a nivel social para la gente», agregó el especialista en materia económica.
Contreras explicó que el caso del aumento en el costo de la gasolina es un ejemplo de que aumentar las tarifas no garantiza la estabilidad del servicio, porque ya existía un deterioro.
«Nosotros estimamos que si se hubiesen hechos las cosas como debían hacerse en el sector de producción de combustible, no habría escasez», indicó el economista.
Por su parte el economista José Miguel Uzcátegui señaló que la mayoría de los países están facilitando los recursos para la coyuntura mundial ante la pandemia y las exigencias económicas, y aseveró que un aumento en las tarifas de los servicios «crearía una carga mayor».
«Cualquier aumento que se genere en los servicios públicos en este momento solo va a agravar la situación, además de que no están en buen estado».
«Pasó con la gasolina» que, de no pagar nada, se pasó a cancelar más que en el exterior; «precios internacionales con continua dificultad para el suministro», explicó Uzcátegui.
Además, instó a que lo servicios públicos sean sometidos a revisión mediante un «plan de estabilización en la economía».
En este sentido destacó que el proceso de estabilidad se inicia con el respaldo del poder adquisitivo de los venezolanos y «la protección a la moneda por parte de Banco Central de Venezuela (BCV)»»En segundo lugar un gasto público que se controle, y en tercero, impuesto que se cobre cuando la gente gane un salario justo», expuso.
Por último, indicó que los servicios públicos no brindan una óptima operatividad y que un actual ajuste complicaría el panorama para los venezolanos.
«La realidad en costo de lo que ofrezca el servicio, por lo tanto, no se puede en estos momentos crear una carga adicional a la que ya existe», concluyó el economista.