Insistió en que la medida llega justo semanas antes de la elección presidencial, luego de que el Ejecutivo se negara en múltiples oportunidades a reducir la tasa del impuesto, pese a la constante insistencia de actores del sector académico, empresarial y ciudadano
El economista y magíster en Políticas Públicas, José Manuel Puente, considera que la eliminación del pago del 2% correspondiente al IGTF, anunciada este 12 de julio por el Ejecutivo Nacional, responde al momento electoral que vive Venezuela.
«En mi opinión es una medida impulsada por el tema electoral, creo que el gobierno se siente muy inseguro por el resultado del 28 (de julio), entonces está tomando múltiples decisiones en materia económica para moldear en positivo la opinión de los ciudadanos votantes», expresó la tarde de este viernes en entrevista para Contrapunto.
Aunque el pago del 2% del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF) aplica únicamente a los contribuyentes especiales que efectúen operaciones en bolívares, el profesor titular del Centro de Políticas Públicas del IESA aclaró que “no hay impuesto que no recaiga en la población. Al final, cuando tú pechas a las empresas, ellos trasladan a sus precios finales ese impuesto”.
Por lo tanto, con esta reducción, «son las empresas y son los ciudadanos» quienes finalmente tendrán que pagar menos por un bien o servicio que antes estaba pechado por el IGTF.
¿Podrían aumentar los salarios?
Al ser preguntado sobre la posible repercusión de esta medida en la mejora de sueldos y salarios, el experto señaló que podría no ser de esta manera, considerando que si el Gobierno cobra menos impuestos, tendrá menor recaudación y por ende, un margen más reducido de maniobra fiscal para hacer aumentos, especialmente en la nómina pública.
En este sentido, detalló que se puede ver beneficiada la empresa o el ciudadano que va a pagar 2% menos, “pero la recaudación del fisco va a ser menor y eso le da menos margen de maniobra para aumentar salarios”.
“Lo que pasa es que estamos en campaña y en estos períodos cualquier cosa, aún lo inimaginable, es posible”, añadió.
Sobresalto inflacionario en puerta
Enfatizó que para entender la política económica del país «de esta coyuntura fiscal y cambiaria», es necesario entender los incentivos electorales que tiene el Gobierno.
Destacó, que el gobierno actual «también ha anclado el tipo de cambio artificialmente en 36 bolívares por dólar durante 6 meses, con lo que vamos a tener que aplicar un macroajuste cambiario en el futuro, después de las elecciones, con un sobresalto inflacionario y un impacto sobre la actividad económica».
Moldear la percepción antes del #28Jul
Insistió en que esta medida llega justo semanas antes de la elección presidencial, luego de que el Ejecutivo se negara en múltiples oportunidades a reducir la tasa del IGTF, pese a la constante insistencia de actores del sector académico, empresarial y ciudadano: «Yo creo que es una medida pensada en el marco de la coyuntura electoral y que las encuestas no favorecen demasiado al presidente Maduro».
Estima que el mensaje es claro, debido al contexto y las fechas en las que se aplica esta medida.
«Creo que en la medida en que la carrera electoral se hace más apretada y que la oposición tiene más posibilidades de ganar, el Gobierno se verá más incentivado a tomar decisiones en política económica, como en lo referido al anclaje cambiario, gastar más en algunas áreas y cobrar menos impuestos, para moldear en positivo la percepción de los ciudadanos votantes.
Una alícuota siempre rechazada
Finalmente, recordó que desde su implementación, este impuesto tuvo muchos detractores, ya que aún se observaban muchas empresas que estaban en proceso de recuperación, en términos de capacidad productiva, tras 8 años de “muy mal comportamiento”.
«No era el momento correcto de hacerlo, era recargar de impuestos a un aparato económico y productivo que todavía estaba muy débil y que se venía recuperando del período comprendido entre los años 2014 al 2020 donde la economía se contrajo en 73% del Producto Interior Bruto (PIB) nacional».