El ente multilateral señala que la economía del viejo continente crecerá menos y siendo la Unión Europea una de las regiones demandantes de materias primas, su merma económica incidiría directamente sobre el desempeño del PIB de los países de América Latina y África
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advierte sobre el peligro que significa para la economía europea el corte del suministro de energía de Rusia, ya que esto afecta directamente los precios de los alimentos y de allí su incidencia directa sobre el consumo.
Alfred Kammer, director del departamento europeo del FMI en una entrevista con El País de España y periodistas de Le Figaro de Francia, La Repubblica de Italia y Die Welt de Alemania, sostuvo que: “La guerra ha supuesto un serio revés para la fuerte pero incompleta recuperación de la pandemia en el continente, que ha dependido demasiado de la inversión pública”.
“Con incompleta queremos decir que dejó el consumo privado muy por debajo de los niveles previos a la crisis, y eso que el apoyo fiscal y monetario impulsó un repunte impresionante del empleo”, argumenta el alto funcionario del FMI.
Asimismo, señala que el ente multilateral, en su informe sobre Europa presentado este viernes 22 de abril, advierte que “el riesgo más preocupante es una interrupción repentina de los flujos de energía de Rusia, que conduciría a pérdidas de producción significativas”.
En este contexto alerta sobre la evolución de los precios de la energía y de los alimentos que, por efecto de la guerra, se mueven al alza, lo que afecta de manera sustantiva el consumo de los hogares en Europa.
“La incertidumbre económica amenaza a la inversión. Al mismo tiempo, esta crisis es un recordatorio de que Europa debe hacer más para mejorar la seguridad energética mediante la apuesta por las renovables y por mejorar la eficiencia”, advierte Kammer.
Las previsiones de crecimiento para los países europeos avanzados se reducen en medio punto porcentual y para las economías emergentes en 1,5 puntos porcentuales.
En el caso de Rusia y Ucrania las proyecciones indican una contracción de 35% y 8%, respectivamente.