Según la encuesta Coyuntura Industrial II Trimestre 2023, realizada por Conindustria, 46% de las empresas emplea la autofinanciación para realizar proyectos de mejoras en sus compañías, mientras que 41% obtiene recursos a través de financiamiento de la banca nacional y 11% solicita préstamos a la banca internacional
El presidente de Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), Luigi Pisella, indicó que la industria privada registró una caída del 7,6% durante el primer semestre del año 2023, producto de una serie de factores que han sido discutidos y ajustados paulatinamente a través de los encuentros sostenidos entre miembros de los sectores públicos y privados.
Bajo poder adquisitivo, falta de financiamiento, tributos fiscales y parafiscales excesivos, el comercio ilícito y exoneración de impuestos a los productos importados, son los principales componentes que han perjudicado a la industria venezolana, según determinó la organización gremial.
Durante la presentación de los resultados de la encuesta Coyuntura Industrial, correspondiente al segundo trimestre del 2023, Conindustria reveló que el volumen de producción evidenció una contracción del 12,7% con respecto al mismo período del año pasado y un -20,3% al compararse con el cierre del último semestre de 2022.
En cuanto a la utilización de la capacidad instalada, se observó una leve mejora respecto a los primeros tres meses del año, pasando de 31,2% a 31,7% en el segundo trimestre. No obstante, los datos se encuentran disminuidos en comparación con las cifras obtenidas al cierre del 2022, cuando se reportó casi un 40% en el uso de la capacidad instalada.
Pisella detalló que los sectores de alimentos, bebidas, textil y calzado, químicos, metales y muebles se encuentran en el rango «promedio» de la utilización de la capacidad instalada; mientras que las farmacias, maquinarias, equipos electrónicos y ópticas han logrado un mayor volumen de producción.
Por su parte, 70% de los empresarios encuestados revelaron una reducción en su volumen de ventas durante el segundo trimestre de 2023, al compararse con el mismo período del año anterior.
Competencia desleal
El presidente de Conindustria indicó que Venezuela actualmente «tiene un techo» a nivel de consumo, que es determinado por el poder adquisitivo. En este sentido, detalló que los sectores industriales, manufactureros, productores de mano de obra y generadores de empleo necesitan competir con los productos importados para lograr avances.
Detalló que cerca del 30% de las importaciones que hace el país se generan a partir de los envíos marítimos o la acción «puerta a puerta», que por tratarse de una práctica dirigida inicialmente a las personas naturales, no pagaban tributos. Sin embargo, recordó que se inició un proceso en el que se comenzará a pagar una tasa impositiva de entre un 35% y 38%, en compras que excedan los 100 dólares estadounidenses.
Con esta medida, explicó, se lograrán generar mayores ingresos para el Estado y mejorará la competitividad de la industria venezolana. «Bienvenidos los productos importados, pero la norma y lo normal, en todo país, es que cualquier producto que ingrese pague sus impuestos», añadió.
Bajo este orden de ideas, señaló que los resultados de esta providencia verán sus frutos durante el segundo semestre de 2023.
Respecto a la situación del comercio ilícito, que para el segundo trimestre del año afectó a 60% de las industrias consultadas, recordó que Conindustria se encuentra realizando una campaña junto al Ministerio de Comercio Nacional y demás entes gubernamentales pertinentes, para reducir las prácticas de contrabando y falsificación de productos, a través de la creación del Estado Mayor Contra el Contrabando.
«Para finales de año, Conindustria prevé que pudiera haber una recuperación de entre 0% y 2% en el sector industrial, atribuida a las medidas que ha tomado el Ejecutivo Nacional en los temas ya indicados. De hecho, 68% de los consultados estima que la situación económica de su empresa podría mejorar en los próximos 12 meses», apuntó Pisella.
Financiamiento, créditos e inversión
Conindustria sostiene que para alcanzar una «reconversión» del sector industrial venezolano se requiere una inversión de 5.000 millones de dólares, pero la cartera de créditos actual del país es insuficiente para cubrir esta cifra.
No obstante, el líder gremial indicó que Venezuela ha registrado una mejora de su situación crediticia, alegando que «pasamos de una cifra bruta de 694 millones de dólares al cierre del año 2022 y hoy, al mes de julio, estamos en un promedio de 1.039 millones de dólares«, precisó.
Aseguró que lo ideal para que una economía funcione «correctamente» es que la cartera de crédito bancario contara con un valor aproximado del 14% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional. Sin embargo, actualmente se encuentra en 1,4%.
Datos de la encuesta realizada recientemente precisan que 46% de los consultados emplea la autofinanciación para realizar proyectos de mejoras en sus empresas, mientras que 41% obtiene recursos a través de financiamiento de la banca nacional y 11% solicita préstamos a la banca internacional.
A fin de estimular el financiamiento en el país, Conindustria propone que se permita la «intermediación financiera de la banca», a fin de incorporar entre 4.000 y 6.000 millones de dólares en efectivo que no se encuentran bancarizados dentro del sistema nacional; y que la banca pueda utilizar poco más de 30% de la proporción de depósitos en cuentas en divisas.
Luigi Pisella destacó la importancia de estimular el crédito al consumo, a fin de beneficiar a las personas naturales: «En la misma medida en que el consumidor tenga un mayor poder adquisitivo va a incrementar la demanda en los productos. Eso va a favorecer al sector industrial, a la generación de empleos y a la recuperación del poder adquisitivo», indicó.