El BCE espera crear entorno más flexible con el objetivo de disminuir la inflación en la eurozona, así lo indicaron representes del ente financiero en Helsinki, Finlandia
El Banco Central Europeo (BCE), informó que ha renunciado a los planes de endurecimiento de sus políticas monetarias, y que los responsables de llevar a cabo sus medidas económicas, están debatiendo si recortar o reiniciar un programa de compra de bonos de 2,6 billones de euros, recientemente finalizado.
En una conferencia celebrada en Helsinki, Finlandia, representantes del máximo ente financiero de Europa, hicieron hincapié en la voluntad y la disposición del BCE de actuar en la desaceleración del crecimiento económico y la inflación en la eurozona.
«Las tasas de interés ya se encuentran en un mínimo histórico y que el balance del BCE es de 4,7 billones de euros, los críticos afirman que la capacidad de sus instrumentos restantes es limitada y que una mayor relajación sólo puede proporcionar un impulso modesto», informó la agencia de noticias Reuters.
El BCE se reunirá el próximo 25 de julio para anunciar las nuevas medidas de estímulo económico para la Unión Europea.