El presidente de Conindustria señaló que los efectos de los apagones fueron «terriblemente destructivos» para el país
Juan Pablo Olalquiaga, presidente de la Confederación Venezolana de Industrias (Conindustria), aseguró este lunes que la banca venezolana no tiene capacidad para financiar al sector industrial, ya que no disponen de recursos suficientes.
En entrevista a Globovisión, Olalquiaga aseguró que el sistema de créditos venezolano es «tan chiquito» que la suma de todos los créditos que los bancos nacionales otorgan alcanza a 139 millones de dólares, cifra que comparó con el sistema de créditos de 50.000 millones de dólares de República Dominicana.
«Hoy en día ningún banco le puede prestar a una empresa 3 o 4 millones de dólares para hacer una inversión porque no dispone del capital suficiente para poderlo hacer», dijo.
El representante del gremio industrial explicó que, según los resultados de la Encuesta de Coyuntura Industria, el 83% del sector industrial registró menor actividad en el mes de enero; y apenas un 17% tuvo igual o mayor actividad.
Olalquiaga detalló que el sector textil registró una caída de 70%, el sector caucho y plástico retrocedió 91%, el químico y farmacéutico cayó 72%, el sector maquinaria y eléctrico perdió 84%, y sectores como metales y productos derivados (sector metalmecánico), y fabricación de muebles y otras manufacturas presentaron caída de 100%.
El presidente de Conindustria aseguró que los efectos de los apagones fueron «terriblemente destructivos» para el país.
Aunque explicó que en términos de producción no afectaron tanto al sector industrial porque ya venían trabajando a niveles muy bajos, desde el punto de vista comercial afectó a las industrias porque no podían distribuir sus productos.
Indicó que el proceso de recuperación será «muy difícil» porque la inestabilidad del sistema eléctrico ha hecho que todavía grandes zonas del país no tengan agua, elemento que no permite a las empresas funcionar.
Estima que el segundo semestre podría cerrar con 1.800 empresas operativas, en comparación con las 2.500 empresas que se mantuvieron operativas durante 2018.
«Nosotros estamos cerca de un 70% de contracción. La destrucción de la economía venezolana es responsabilidad de unos funcionarios que no saben cómo manejar una economía», aseveró.