Entre las sanciones que solicitan para castigar al Gobierno ruso por el ataque a Ucrania está esxclusión del sistema de pagos internacional de mayor alcance del planeta
Economía, política y guerra son conceptos complementarios y el conflicto en Ucrania ha desatado una serie de discusiones sobre cómo detener la decisión rusa de avanzar con sus tropas sobre Kiev y la posibilidad de una ocupación.
Además de las sanciones a los activos de Putin y Lavrov en la Unión Europea, la decisión de los Estados Unidos de congelar activos de empresas rusas en su territorio e impedir sus operaciones hay una petición más ambiciosa: Excluirlo del sistema SWIFT.
SWIFT es el acrónimo en inglés de la Sociedad para las Telecomunicaciones Financieras Interbancarias Mundiales que fue creado en 1973 y que conecta las entidades financieras del planeta.
Esta es una red de alta seguridad que facilita las armonización de las operaciones financieras entre 11.000 instituciones financieras de 200 países.
De excluir a a Rusia de este sistema se quedaría aislada del sistema financiero internacional con graves consecuencias para toda la economía rusa que ya creo su propio sistema, pero agrupa solo el 20% de sus operaciones internas.
Sin embargo, el peso de las operaciones del Estado ruso y de las empresas de este país no puede ser desdeñado por el sistema financiero internacional. Muchas empresas europeas están expuestas a la actividad rusa y de tomarse la decisión de excluirla también entrarían en «zona de peligro».






