Djokovic, defensor del título, comenzará el lunes abriendo el juego en la Pista Central
El mes pasado, Novak Djokovic hizo historia al conquistar su 23º Major en Roland Garros. Tres semanas más tarde, el serbio llega a Wimbledon decidido a conseguir más y a seguir sumando a los siete trofeos que ha ganado en SW19.
«Todavía tengo hambre de éxito, de más Slams, de más logros en el tenis», dijo Djokovic en su rueda de prensa previa al torneo el sábado. «Mientras exista ese impulso, sé que soy capaz de competir al más alto nivel. Si eso decae, entonces supongo que tendré que afrontar circunstancias probablemente diferentes y tener un enfoque distinto. De momento, sigue habiendo ganas».
«Por supuesto, mucha gente se me acerca y me felicita [por Roland Garros], recordándome el éxito histórico, lo cual es agradable, por supuesto, es muy halagador. Pero al mismo tiempo, mi mente está dirigida hacia Wimbledon, que es el próximo Slam, cuál es la siguiente tarea. Así es la vida de un tenista profesional. Creo que ese tipo de mentalidad es necesaria para mantener esa intensidad. Si realmente quieres tener una oportunidad y aspirar a más títulos de Slam, necesitas mantener esa concentración y devoción.»
Djokovic aspira a igualar esta quincena a Roger Federer con un récord de ocho títulos de Wimbledon, tras haber ganado las cuatro ediciones anteriores del torneo sobre hierba. El No. 2 del mundo, que logró su primer título en el torneo en 2011, no ha perdido un partido en la Pista Central desde 2013, cuando cayó contra Andy Murray en la final.
El segundo cabeza de serie está satisfecho de cómo se ha establecido como la fuerza dominante en la superficie en los últimos años.
«Durante varios años me costó llevar mi juego al siguiente nivel en las pistas de hierba porque, naturalmente, para mí es mejor deslizarme, y la hierba no es una superficie que perdone los movimientos de deslizamiento extremos en la pista», dijo Djokovic. «Tuve que aprender a moverme, a caminar, a jugar, a leer los piques».
«La hierba es la superficie más rara que tenemos en este deporte, al contrario que hace 40, 50 o 60 años, cuando tres de cada cuatro Slams se jugaban sobre hierba. Hoy en día no es así. Lleva tiempo, más que en cualquier otra superficie, acostumbrarse a ella. Pero creo que en los últimos 10 años de mi carrera me he adaptado muy rápido a esta superficie. Creo que los resultados aquí lo demuestran».
Djokovic comenzará su campaña en Wimbledon contra Pedro Cachín con el No. 1 del mundo Carlos Alcaraz en la otra mitad del cuadro. Djokovic, de 36 años, que derrotó al joven de 20 en las semifinales de París, es consciente de la amenaza del español, pero sigue centrado en sí mismo.
«Carlos es un chico muy simpático que se comporta de forma muy madura para tener 20 años. Ya tiene muchos galardones a sus espaldas, haciendo historia tan joven», dijo Djokovic al ser preguntado por Alcaraz. «Creo que es un gran jugador, que aporta mucha intensidad y energía en la pista, y que además es muy humilde y tiene una personalidad agradable fuera de ella».
«En mi caso, no necesito a Carlos ni a nadie para encontrar ese impulso y motivación extra cuando entro en los Slams, porque sé que tengo que ganar siete partidos para ganar un título. Así que no importa a quién me enfrente del otro lado de la red. Tengo que hacer lo que tengo que hacer. La mayor parte de mi atención se centra en mi cuerpo y mi mente, en mi juego, en intentar, supongo, llevarlo a un estado óptimo en el que dé lo mejor de mí en cada partido».
Djokovic, defensor del título, comenzará el lunes abriendo el juego en la Pista Central.
