El serbio logró obtener el título del penúltimo Grand Slam del año en un juego de cinco sets, que duró casi 5 horas
Novak Djokovic y Roger Federer disputaron este domingo la final más larga de la historia del Grand Slam de Wimbledon, disputada por primera vez en tie-break a 12-12 tras el cambio de las reglas del torneo.
El serbio, primero del ránking mundial, ganó este domingo su quinto torneo de Wimbledon derrotando en una final épica, que batió el récord de duración en este Grand Slam, el suizo Roger Federer en cinco sets.
El partido tenía 4 horas y 49 minutos cuando los dos jugadores, primer y segundo cabeza de serie, pasaron al desempate en el quinto set.
Djokovic necesitó cuatro horas y 55 minutos para imponerse al suizo, segundo cabeza de serie, por 7-6 (7/5) 1-6, 7-6 (7/4), 4-6 y 13-12 (7-3), recurriendo por primera vez a un tie-break final de 12-12 tras al cambio de las reglas en Wimbledon.
«Es inspirador lo que hace Roger a sus 37 años. Lo tomo como ejemplo» comentó Nole
El serbio, de 32 años, salvó dos puntos de partido para sumar su 16º título de Grand Slam, colocándose a cuatro del récord en categoría masculina del propio Federer (20), que en agosto cumplirá 38 años.
Djokovic también se acerca al número de títulos en Grand Slam del español Rafa Nadal, que cuenta con 18.
«Creo que ésta fue, si no la final más excitante en la que haya tomado parte, sí una de los dos o tres mejores de mi carrera», afirmó el serbio al levantar el trofeo tras un quinto set de infarto que duró dos horas.
«Cuando era un niño, soñaba con ser tenista y este siempre fue el torne en el que siempre quise participar y ganar. Hacia trofeos de distintos materiales en mi casa soñando con estar aqui, y nuevamente lo logré» dijo el nuevo campeón de Wimbledon.