A pesar de que muchos dudan de la gestión del DT ruso al mando de aquella selección de Camerún, es innegable el aporte como constructor de un equipo en donde la fuerza era determinante
Los equipos africanos siempre han generado expectativas en la Copa del Mundo, cabe destacar las actuaciones de Camerún en Italia 90, Senegal en 2002 y Ghana en Sudáfrica 2010. Estos tres seleccionados y representantes del África negra son recordados por haber rozado la gloria de las semifinales por muy poco y quedarse en cuartos por un penal o en la tanda de penales y hasta por un extinto gol de oro.
También es recordado el triunfo de Túnez 3-1 sobre México en 1978, la victoria de Argelia sobre Alemania en el 82 y como olvidar el pase de Marruecos en 1986 como primero de grupo con victoria sobre Portugal y empate sin goles ante Inglaterra. El debut de Nigeria llegando a octavos de final en USA 94 y Argelia en Brasil 2014 que llevó a la posterior campeona, Alemania, a tiempo extra en octavos.

«Leones Indomables»
Pero ante esta historia de equipos africanos, hoy queremos traer a la mesa al artífice de «Los Leones Indomables», el Camerún de Italia 90, el equipo que sorprendió al mundo del fútbol.
A pesar de que muchos dudan de la gestión del DT ruso Valery Nepómnyashchy al mando de aquella selección de Camerún, es innegable el aporte como constructor de un equipo en donde la fuerza era determinante y que encajaba perfectamente con el 4-4-2 que practicaba el nacido en Slávgorod.

Contra los grandes
Los delanteros Roger Milla y Francois Oman-Biyik, el mediapunta Cyrille Makanaky y el portero Thomas N’Kono, son algunos de los nombres que le tocó dirigir a Nepómnyashchy, un entrenador que logró sacar lo mejor de un equipo africano para la fecha y que les hizo competir frente a los equipos grandes, obteniendo triunfos ante la Argentina de Maradona, la Rumania de Hagi y la Colombia del Pibe Valderrama. Además vendieron cara su derrota en 120 minutos frente a la Inglaterra de Lineker, en cuartos de final.

El llamado
Valery Kuzmich Nepomnyashchy fue el artífice de un equipo que más que brillar tácticamente era una máquina en potencia. El DT y exfutbolista aceptó el cargo en 1988, era el reto más grande de su carrera, discreta hasta ese entonces, en su curriculum predominaba el cargo de entrenador asistente y fue en 1982 cuando tomó las riendas del Kolhozchi Ashkhabad hasta 1983.
El soviético preparó a «Los Leones Indomables» antes del mundial en Yugoslavia, con el sistema 4–4-2 en la mente, lograba reproducir su idea de juego en 11 gladiadores que remaban en una misma dirección y que no se iban a intimidar ante nadie.

África en el mapa del fútbol
Se puede decir que el Camerún de 1990 puso al África Negra en el mapa del fútbol, de allí en adelante cualquier país africano podía competir de tu a tu con el que le pusieran por delante, y en el banquillo de esa selección estaba sentado Valery Nepómnyashchy, un hombre que pasó bajo cuerdas pero que realizó una de las más grandes hazañas de la historia del fútbol.

Trayectoria
Posterior a este logro, Nepómnyashchy dirigió equipos en Turquía, en 1996 se le reconoció su aporte al balompié de Corea del Sur, en China al mando del Shenyang Haishi en el año 2000 fue nombrado como entrenador del año, recibió la insignia de servicio a la región de Tomsk en 2010, región en donde al mando del FC Tom Tomsk, dirigió dos períodos, 2008-2011, 2014-2016.
El FC Baltika Kaliningrad fue su último club en 2018, hoy en día cuenta con 78 años, y en su hoja de trabajo siempre estará presente África, como el artífice de la hazaña de Camerún en el Mundial de 1990.
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