Alejandro Araque: la muralla que le dio el Apertura a Estudiantes de Mérida

Humberto Viera / IG: humandresv

El recién coronado campeón del Torneo Apertura del fútbol venezolano, compartió sus experiencias en el campo de juego con Estudiantes de Mérida

La tanda de penales es una situación que los equipos quieren evitar a toda costa a la hora de jugar un partido importante. La presión, tanto para el cobrador como para el arquero, se resume en una corta distancia de doce pasos, en donde aparentemente la suerte y el destino definen el marcador final.

En un extracto de su «Poema al fútbol», el exjugador argentino Quique Wolff, expresa lo siguiente «Cómo vas a saber lo que es la soledad si jamás te paraste bajo los tres palos a 12 pasos de uno que te quería fusilar y terminar con tus esperanzas». 

Pues el arquero de Estudiantes de Mérida, Alejandro Araque, no se sintió solo, ya que fue quien terminó con las esperanzas de tres pateadores de Mineros de Guayana (consecutivamente) en la tanda de penales, en el partido de vuelta por la final del Torneo Apertura de la Liga Futve, para darle así otro Apertura al cuadro académico luego de 18 años.

El primer penal se lo atajó a Richard Blanco, quien pateó fuerte hacia el lado derecho, pero la mano izquierda de Araque desvió el balón al travesaño. En el segundo, el zurdo José Luis Marrufo intentó por el mismo lugar pero Araque se la adivinó. El arquero merideño le ahogó el grito de gol a Miguel Camargo en el tercer turno de la tanda para Mineros.

«Estoy bastante feliz. Fue mi anhelo desde que entre al club, ya que soy uno de los que lleva mas tiempo allí. Es el único equipo que he tenido como profesional y quedar campeón con Estudiantes después de 18 años es algo sumamente importante. Gracias a Dios pudimos hacer historia» comentó Araque con respecto al título obtenido.

El guardameta de 23 años, debutó con Estudiantes en el año 2013 en un empate 1-1 frente  al Zamora FC, y ya cuenta con más de 150 partidos con la institución.

En este tramo de temporada, jugó 25 partidos, vio acción por 2.250 minutos, permitió 16 goles y mantuvo 10 veces el arco en cero, desempeño que le valió el premio al Jugador Más Valioso del Torneo.

¿Para ti como merideño que significa este nuevo título para Estudiantes?

Es un sueño logrado. Fue algo increíble el recibimiento que nos dio toda la afición merideña el día después de ganar la Copa. Ver a la gente volcada en las calles sin importar lluvia y verlas conmocionadas de la alegría es algo que nunca olvidaré Siempre he sido hincha del equipo. Toda mi familia es hincha del equipo y gracias a ellos empezó mi recorrido y amor por estos colores.

Tres penales consecutivos parados en la final ¿Estabas consciente de este récord cuando estabas en la cancha?

La adrenalina hizo que me enfocara. Estaba bastante concentrado en el momento y logré darme cuenta de lo que hice días después de la final. Gracias a Dios logré marcar historia tapando tres penales en la final del Apertura.

Con tu desempeño en esta temporada ¿sueñas con el llamado de Dudamel para la selección?

En todo el torneo me fue muy bien gracias al trabajo. Para eso estoy, para hacerlo bien cada domingo, y obviamente espero el llamado a la Selección, algo que se que con el trabajo duro se puede lograr.

¿Ahora el trabajo será enfocarse en el Clausura y en el Campeonato Absoluto?

Sabemos que el torneo será igual y no cambiará nada. Ya logramos asegurar la final de la «estrella» y  debemos mentalizarnos en el buen trabajo  para hacerlo bien en el Clausura, luego lograr entrar a la liguilla y, ¿por qué no? soñar con el Campeonato absoluto.

¿Y cuáles son los objetivos con respecto a la Copa Libertadores?

Es importante el logro del grupo de hacer que el equipo volviera a instancias internacionales. Tenemos el objetivo claro aunque sabemos que será difícil porque jugaremos con los campeones de países como Argentina, Chile y Brasil. Nosotros tenemos el espejo de lo logrado por por Richard Páez en cuartos de final, por lo que nosotros estamos enfocados en trabajar y hacerlo bien para trascender más allá, con el favor de Dios.